La rápida actuación de la Policía Nacional en Zaragoza ha permitido salvar la vida de un niño de 10 años que se había atragantado con una gominola y le estaba obstruyendo las vías respiratorias.

Fue a las 19:45 horas del pasado miércoles 11 de mayo, cuando un padre desesperado alertaba al CIMACC 091 que su hijo se estaba asfixiando y que algún objeto le impedía respirar. Varias patrullas de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana llegaron al domicilio en la calle Escultor Félix Burriel y sin dudarlo, un agente de la UPR le practicó la maniobra de primeros auxilios Heimlich hasta que el niño expulsó el objeto que le obstruía la respiración, resultando ser una gominola.

Los agentes solicitaron la colaboración de los servicios sanitarios para asistir y valorar la salud del menor, comprobando que sus constantes vitales eran correctas. Su padre lo trasladó al Hospital Materno Infantil según marca el protocolo.

 La maniobra de Heimlich o compresiones abdominales, es un procedimiento rápido de primeros auxilios para tratar para desobstruir el conducto respiratorio el cual puede estar bloqueado por trozos de comida o cualquier otro objeto. Sólo debe usarse cuando la obstrucción de la vía aérea es grave y la vida está en peligro. Si la persona que se asfixia puede hablar, toser con fuerza o respirar adecuadamente, no se requieren intervenciones.