Investigación

El entorno de las gemelas de Barcelona responsabiliza a las escuelas de no actuar ante el acoso que sufrían

En las cartas que dejaron las menores, la fallecida expuso la presión que no la dejaba vivir y su hermana, su voluntad de acompañarla allá donde fuera

Velas, flores y pancartas en el domicilio de la menor de 12 años que el pasado martes se suicidó saltando por el balcón en Sallent (Barcelona).

Velas, flores y pancartas en el domicilio de la menor de 12 años que el pasado martes se suicidó saltando por el balcón en Sallent (Barcelona). / EFE

E.B./A.V.

Una treintena de personas de la familia de las gemelas de Sallent (Barcelona), cuyo salto al vacío desde un tercer piso ha conmocionado a la comunidad educativa, y amigos de las niñas han salido a la calle este viernes clamando "justicia" y "stop 'bullying'". Ha sido una protesta que ha salido desde la escuela Torres Amat hasta el instituto Llobregat, porque entienden que en el primer centro, donde las niñas habían sido escolarizadas en primaria, ya hubo una situación de acoso hacia las gemelas, para los manifestantes no bien tratado por parte del profesorado, y que la situación continuó en el instituto, donde también afirman que no se afrontó bien la resolución del conflicto que hacía malvivir a las niñas.

La gemela que falleció en la caída había hecho notar a los suyos que malvivía con la presión de compañeros, una situación que se habría agravado en los últimos meses por el hecho de que se había cortado el pelo corto y había expresado su voluntad de realizar un cambio de género.

En las dos cartas que ambas dejaron antes de decidir quitarse la vida, la fallecida expuso esa presión que no la dejaba vivir y su hermana, que permanece estable dentro de la gravedad, expresó la voluntad de acompañar a su gemela allá donde fuera. En estas misivas no se hacía referencia explícita al 'bullying' escolar sobre el que insiste el entorno. Las referencias que han dejado las niñas son de carácter más general.

La Generalitat no detectó acoso

Sobre el acoso se ha pronunciado este viernes el 'conseller' de Educación de la Generalitat, Josep Gonzàlez-Cambray, que ha insistido en que el instituto Llobregat, en el que las niñas cursaban 1º de la ESO, "no detectó ninguna situación específica de acoso" escolar.

"Un suicidio es un fracaso de toda la sociedad", ha dicho Cambray, que ha señalado que en "situaciones tan trágicas" como la de Sallent, los motivos son "multifactoriales" y, en línea con lo que sostiene ahora el Departament d'Educació, no ha descartado que las niñas sufrieran acoso escolar. Ha insistido, sin embargo, en que a Educació no le consta que el instituto hubiera activado el protocolo contra el acoso. Tampoco les consta, ha añadido, que la gemela fallecida tuviera dudas sobre la identidad de género.

"El centro no había detectado ningún caso ni ninguna problemática específica relacionada con el 'bullying'", ha dicho. De hecho, ha explicado que precisamente eso fue lo que llevó a la 'conselleria' a descartar inicialmente esta hipótesis. "Esta situación no existía", ha apuntado. Ha reconocido que las informaciones que fueron recibiendo posteriormente, y sobre todo en las últimas 24 horas, fueron las que motivaron al Departament a activar a la Unidad de Apoyo al Alumnado en Situación de Violencia (Usav) para investigar a fondo el asunto. Paralelamente, hay una investigación abierta de los Mossos.

Trabajar la prevención

Cambray ha defendido que las políticas de su Departament van en la dirección de evitar conductas de riesgo entre los adolescentes, pero ha advertido de que "es obvio" que los resultados "no pueden ser de un día para otro". En este sentido ha avanzado que Educació y la Conselleria de Salut se están "replanteando el programa Salut-Escola", pero no ha dado más detalles.

Por su parte, el alcalde de Sallent, Oriol Ribalta, ha matizado también la postura inicial del ayuntamiento, que descartaba el acoso. "En ese momento no teníamos información para hablar de 'bullying'", ha dicho. Ribalta ha afirmado que es un caso "multifactorial". "Las causas son diversas, y ese cúmulo de cosas debe tenerse en cuenta", ha subrayado. En este sentido, asegura que el entorno "era muy complicado, existía seguimiento y atención de los Servicios Sociales". Sobre el posible racismo, Ribalta ha lamentado que haya podido ser así y defiende que Sallent es un pueblo "tolerante".

El Ayuntamiento de Sallent se está haciendo cargo de la manutención de la familia desde que sucedieron los hechos. También ha trabajado para acelerar los trámites para que los abuelos de las gemelas, residentes en Argentina, puedan venir y, una vez estén aquí, se les pagará la estancia. Además, también pagará los gastos de entierro.

En cuanto a la niña que permanece ingresada, ha explicado que su estado es estable dentro de un diagnóstico de estado crítico, pero "con esperanzas de recuperación". Según el entorno familiar, tendría lesiones importantes en un pulmón, pero confiaban en que pueda recuperarse.