El nombre de David Ferrer irá ya siempre ligado al de Juan Antonio Samaranch. Uno hizo historia para el deporte mundial en los despachos y el otro, David, sigue haciéndolo en las pistas de todo el mundo hasta el punto de que ha ganado ya tres títulos en 2015 -24 a lo largo de su carrera-.

Pero a pesar de sus recientes éxitos en Doha, Río de Janeiro y Acapulco, David valora de forma más especial si cabe haber sido el elegido para ganar el Premio Samaranch y más aún el haberlo podido celebrar en casa, en el Club de Tenis Valencia y rodeado de cientos de amigos y familiares. El propio David destacó así el valor añadido de un premio del que solo pueden presumir también Carlos Moyà y Rafa Nadal. «Estoy muy agradecido porque lo recibo en el Club de Tenis Valencia, del que soy socio de honor, aquí en mi casa y tengo aquí a mi familia y a mi gente cercana, por lo que estoy muy contento. Estoy viviendo grandes emociones. Siempre es bonito verse reconocido pero es mucho más bonito que te den el premio no ya por tu carrera deportiva sino por mis valores como persona. Eso me hace sentirme muy orgulloso de todo lo que he llegado a conseguir».

Además, el de Xàbia destacó que «si volviera a tener 20 años volvería a hacer todo igual, porque el tenis me ha dado mucho más de lo que esperaba, por lo estaré siempre eternamente agradecido a este deporte por el que siento pasión, es el mejor premio que puedo recibir».

El número 8 de la ATP, que también estuvo acompañado por el alcalde de Xàbia, José Chulvi, recibió el premio de manos del presidente de la Generalitat Valenciana Alberto Fabra, quien destacó de él que «transmite unos valores para que la gente crea en el deporte y piense que nada es imposible». A su lado también estuvo el presidente de la Federación Española de Tenis, un José Luis Escañuela que destacó que «hace que sus victorias y derrotas las sintamos como nuestras».

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, añadió que «es uno de los mejores deportistas valencianos de la historia, un ejemplo para todos de esfuerzo, de ganas de triunfar y de espíritu luchador».

El anfitrión y presidente del Club de Tenis Valencia, Ramiro Verdejo, fue el primero en tomar la palabra y tras recordar que Samaranch fue el que propuso el tenis como deporte olímpico, añadió de Ferrer que «con su compromiso, esfuerzo, trabajo y coraje, ha llegado a ser un número 1 al que todos admiramos».

Ferrer también recibió las cariñosas palabras del presidente del COE, Alejandro Blanco, quien además anunció que va a proponer un reconocimiento al CT Valencia en la próxima gala del COE por el hecho de ser un club centenario y ejemplar. «Su trabajo, esfuerzo, talento y valores han llevado a Ferrer al éxito. Es el número 1 en valores».

Entre los muchos asistentes al acto estuvieron también representantes políticos como María José Catalá, Juan Carlos Moragues, Marta Torrado, Teresa García, Belén Juste, Cristóbal Grau y Mateo Castellá, además del presidente de la Federación de Tenis de la Comunidad Valenciana, Antonio Martínez Cascales, los jugadores Pablo Andújar y Dani Gimeno, el entrenador de David, Paco Fogués y su agente, Albert Molina.

Antes del acto y tras reconocer que estaba cansado por el viaje de vuelta de México y el jet-lag, Ferrer confirmó que aún no sabe si disputará la próxima eliminatoria de la Copa Davis. «No lo sé, me queda muy lejos. No descarto jugarla, pero decir ahora si voy a jugarla o no? queda aún muchísimo tiempo». Sí tiene más claro que el Valencia Open del que es copropietario bajará de categoría a 250. «No es fácil mantener un Open 500 y más en estos tiempos. Seguirá habiendo un torneo de tenis en la C. Valenciana y no creo que varíe mucho. Seguirán viniendo grandes jugadores».

El Valencia CF presente en el homenaje a David Ferrer