Raymond Moore, director del torneo de Indian Wells, dimitió este martes tras la tormenta que provocaron sus declaraciones sexistas del domingo, en las que aseguró que, si fuera una mujer tenista, se "arrodillaría cada noche y daría gracias a Dios por el nacimiento de Roger Federer y Rafa Nadal".

La noticia fue dada a conocer por Larry Ellison, propietario del torneo, en un comunicado. "He tenido ocasión de hablar hoy con Raymond Moore y me ha informado de que ha decidido dimitir como director del torneo de manera inmediata", explicó Ellison. "Comprendo totalmente su decisión", agregó.

Ellison recordó que hace casi 50 años, Billie Jean King comenzó su histórica campaña por un tratamiento igualitario de las mujeres en el mundo del tenis, y que, desde entonces, se ha producido un movimiento "multigeneracional y progresivo" para tratar a hombres y mujeres por igual en el deporte. "Gracias al liderazgo de Billie Jean, Martina Navratilova, Venus Williams, Serena Williams y tantas otras grandes atletas, un importante nivel de éxito se ha conseguido al respecto", manifestó.

El empresario recalcó que hace una década que Indian Wells, al igual que los principales torneos del tenis, desembolsa la misma cantidad en metálico en premios para los hombres y para las mujeres.

La polémica se inició con unas incendiarias declaraciones de Moore durante su tradicional charla con los medios en la última jornada de competición. "En mi próxima vida, cuando regrese, quiero ser parte de la WTA porque se aprovechan del éxito de los hombres. No toman ninguna decisión y son afortunados. Muy afortunados", apuntó. "Si yo fuera una mujer tenista, me arrodillaría cada noche y daría gracias a Dios por el nacimiento de Roger Federer y Rafa Nadal. Ellos son quienes han llevado el peso de este deporte", continuó.

Horas después, Moore se disculpó por sus palabras. "Durante mi desayuno con los medios de comunicación, hice unos comentarios sobre la WTA que fueron de extremadamente mal gusto y erróneos. Lamento esos comentarios y pido perdón a todas las jugadoras y a la WTA en su conjunto", indicó. "Tuvimos una final que refleja la fuerza de las jugadoras, especialmente de Serena (Williams) y Victoria (Azarenka), y de toda la WTA. De nuevo, lamento enormemente mis comentarios", añadió.

Los comentarios de Moore, a pesar de su rectificación, fueron recibidos con repulsa por parte de Serena Williams y Victoria Azarenka, finalistas en el campeonato del desierto californiano. "Considero que esos comentarios son equivocados y muy, muy inciertos", apuntó Williams, subcampeona en Indian Wells.

La campeona, Azarenka, replicó: "Creo que es un problema que se da en todo el mundo. No sólo en el deporte. También en los negocios. Tratamos de hablar sobre igualdad. A veces no se reconoce. Lo mejor que hacemos las mujeres es sobreponernos a esos comentarios. No se escuchan cosas así sobre los hombres".

Por su parte, Novak Djokovic, campeón por quinta vez en Indian WellsNovak Djokovic, concedió que el comentario no fue "políticamente correcto" pero acabó metiéndose más en el charco al defender la idea de que "los tenistas deben ganar más dinero que las tenistas".

Y recalcó: "Mientras que haya datos, estadísticas e información disponible sobre quién genera más atención y atrae más espectadores, creo que (el dinero) debe ser distribuido justamente". Cuando se le recordó al jugador que una de las cualidades del tenis profesional es la correlación entre hombres y mujeres de la ATP y la WTA en los torneos, y que Jelena Genci fue su primera entrenadora, contestó: "Tengo un respeto tremendo por lo que están consiguiendo las mujeres en el deporte global". "Sé por lo que pasan con sus cuerpos, que son tan diferentes a los de los hombres (...) Ya sabes, las hormonas y esas cosas, no necesitamos entrar en detalles. Las mujeres saben de qué hablo. Tengo gran admiración y respeto por ellas al luchar a tan alto nivel", declaró.