La tenista hispano-venezolana Garbiñe Muguruza se clasificó este miércoles con autoridad para la tercera ronda de Roland Garros, segundo 'Grand Slam' de la temporada, después de ganar a la sueca Johanna Larsson por 6-4, 6-1, mientras que la castellonense Sara Sorribes se despidió ante la estadounidense Sloane Stephens (6-1, 7-6).

La valenciana no pudo acompañar a la número española después de no poder sorprender a una de las favoritas, la estadounidense Sloane Stephens, subcampeona el año pasado y que se impuso por 6-1, 7-6(3).

La americana estaba advertida del peligro de la castellonense en esta superficie tras los apuros vividos en Charleston (Estados Unidos), y aunque no le dio tantas opciones, sufrió bastante en el segundo parcial.

La vallera disputaba su tercer partido de Grand Slam, y el segundo en Roland Garros, pero cayó apeada en un escenario imponente como la pista central Philippe Chatrier, reservada en este caso para la favorita número siete.

En el primer set, Stephens dominó a placer tras una fuerte salida, pero en el segundo se topó con más resistencia de la española. Sorribes rozó incluso forzar una tercera y definitiva tercera manga cuando fue capaz de aprovechar los muchos errores de la estadounidense para levantar un 3-0 y llegar a tener saque en dos ocasiones (4-5 y 5-6) para llevarse el parcial. No lo aprovechó y se despidió de París en la 'muerte súbita'.

Muguruza, campeona de París en 2016, en cambio, olvidó los apuros pasados en su estreno del pasado domingo ante la americana Taylor Townsend y firmó una convincente segunda victoria antes de tener un examen en la tercera ronda ante la ucraniana Elina Svitolina, novena favorita.

La de Caracas jugó a mucho mejor nivel y con mucha más consistencia que hace tres días, con un servicio que le funcionó y con el que pudo desarbolar a una Larsson que no pudo aguantar el ritmo en la segunda manga.

Muguruza sólo perdió diez puntos con su servicio, con el que no concedió ni una sola oportunidad de rotura a su rival. Con una de sus armas funcionando, sus golpes hicieron más daño y terminó y con 16 ganadores por 10 errores no forzados.

La decimonovena cabeza de serie en la arcilla roja parisina encarriló la primera manga gracias a un 'break' en el quinto juego, una desventaja que no pudo recuperar la sueca, lastrada todo el partido por sus errores no forzados (24).

La tenista hispano-venezolana se asentó tras este primer óptimo set y desplegó un buen tenis para abrir una buena brecha con dos roturas y sólo cuatro puntos perdidos con el que terminó de sentenciar a Larsson.

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