El ruso Daniil Medvedev afirmó en rueda de prensa posterior al partido que el niño que tenía dentro de él "dejó de soñar" después de su experiencia con un público que animó incansablemente a su rival y ganador, Rafael Nadal. En varios momentos de la final del Australian Open, el número 2 del mundo fue abucheado por los aficionados.

"Voy a empezar con la historia de un niño que soñaba en grande. Cogí mi primera raqueta con seis años y soñaba con los escenarios más grandes. Hoy ese niño ha dejado de soñar", indicó un jugador al que su personalidad en la pista le ha impedido, a sus 25 años, sintonizar con el público del mundo del tenis.

Cabe recordar que en la semifinal contra Stefanos Tsitsipas la emprendió a gritos con el juez de silla, al que denunciaba el 'coaching' no permitido del padre y entrenador del jugador griego. Posteriormente, la organización del torneo sancionó al ruso con 11 000 euros por el incidente. El carácter de Medvedev le hace responder a la grada con algunos de sus puntos en los momentos en los que no tiene a los espectadores de cara.

"Tuve mi primera raqueta con seis años. Empecé viendo torneos en la tele, luego jugué torneos en Rusia, en Europa, en el Olímpic Festival, con 2000 personas viéndolo. Siempre soñé con escenarios muy grandes. Como júnior, ves a los profesionales. Ese es el momento en el que sueñas en estar en estos escenarios... Hoy es uno de los momentos en los que el niño dejó de soñar", señaló.

Sobre lo puramente tenístico, comentó: "Él fue muy fuerte, aunque no se ha entrenado mucho. No tengo muchos arrepentimientos en cuanto al tenis que he jugado. Voy a trabajar más fuerte. No estoy decepcionado con mi tenis".

"En el quinto (set), un chico dijo 'vamos Daniil' y todos le mandaron a callar. Es muy triste. No sé si jugaré al tenis cuando pase la treintena. El niño que soñaba dentro de mí ya no está y así es duro", insistió Medvedev.

La defensa a Djokovic, en el origen del conflicto

Cabe recordar también como en el partido de cuartos de final contra Felix Auger-Aliassime ya comenzaron las rencillas entre el público de la Rod Laver Arena y el tenista ruso. Además de sus gritos en la celebración de los puntos, en su intervención pospartido contestó a la pregunta de cómo había hecho para remontar un duelo que perdía dos sets a cero con unas palabras que no gustaron nada a la grada.

"No sé si a la gente le gustará, pero estando dos sets abajo me pregunté a mí mismo: ¿qué haría Novak en esta situación?", dijo el moscovita con su pícara rebeldía con los micrófonos. El tenista serbio no pudo jugar en Australia al ser deportado de un país que no permite la entrada a las personas no vacunadas contra la Covid-19. La reacción de los aficionados alternó aplausos hacia el ruso y el serbio, pero también muchos silbidos, por lo que Medvedev rápidamente agregó: "También pienso en esos casos como Rafa o Roger... Novak es uno de los más grandes, junto con Roger y Rafa, y tengo que recorrer un largo camino para llegar a su nivel".

"Rafa, ¿estás cansado?"

Este domingo, en la ceremonia de clausura, Daniil Medvedev bromeó en el inicio de su intervención tras cinco horas y 25 minutos de batalla tenística. "Enhorabuena, Rafa, ¿cómo estás? ¿Estás cansado?", y continuó: "Has hecho un partido a un nivel muy alto. Enhorabuena por tu vigesimoprimer grande... Yo también estoy un poco cansado. Felicidades, por favor, que no esté acabada tu competencia con Novak y Roger, queremos veros a los tres de vuelta. Eres el héroe de la semana", argumentó.

"A lo mejor, alguno de mis fans ha roto la televisión. Les agradezco a todos mis fans el apoyo e intentaré hacerlo un poquito mejor la próxima vez", concluyó, por fin, entre un aplauso generalizado al que se sumó sentado en una silla Rafa Nadal.