Los prolegómenos aventuraban un partido complicado. Las tres bajas interiores más la de Lucic eran handicaps serios para que el equipo pudiera ganar en Santiago de Compostela. Había que ponerse el mono de faena y estar acertados. Premisas simples pero que no siempre se cumplen. El sábado fue el día.

El 6/7 en triples en el primer cuarto esbozaba las líneas del partido. El equipo gallego apelaba a un mal arranque que propicio la diferencia de once puntos en los primeros diez minutos, pero nada más lejos de la realidad. En el segundo cuarto, un triple de Pecherov enseñaba la realidad del choque. El Valencia Basket surcaba a velocidad de crucero y Moncho Fernández veía impotente desde el banquillo como su equipo se iba diluyendo en pérdidas de balón que supusieron recuperaciones y canastas fáciles una y otra vez.

Los taronja tenían mucho terreno ganado al descanso (37-58). En el tercer cuarto de vio un atisbo de reacción local (49-66; min . 25) que fue frenada por un Valencia Basket bien llevado en la dirección por Lafayette y con el acierto de Sato desde la esquina. Curiosamente en este tercer período no hubo ningún triple taronja, pero poco o nada se notó. Con 24 puntos de renta y con diez minutos por jugar se esperaba un maquillaje local en el resultado, pero fue todo lo contrario. Los pupilos de Perasovic querían más y sabían que era su noche. Un triple de Ribas y una canasta posterior de Doellman certificaban la superioridad valenciana (56-86; min.36).

Obradoiro se asemejaba cada vez más a un boxeador noqueado que iba encajando golpes en forma de triples con Rafa Martínez, Sato y Ribas, que debutaba estaba temporada en liga tras recuperarse de su lesión en el tobillo. Rio Natura Monbus tenía problemas para anotar y sobre todo para superar una defensa taronja que pese a lo amplio del marcador nunca bajó los brazos, lo que le hizo acabar con 18 recuperaciones y forzar 23 pérdidas de balón en los locales. Mención especial en este apartado a Van Rossom, que superó con creces a sus rivales en pista, tanto Luz, que estuvo muy gris, como el griego Xanthopoulos, que no anotó ni una solo canasta en juego.

Una vez asegurada la victoria, Sato dejó al Valencia Basket con la mágica cifra del centenar de puntos (70-100; min.38) como no tras un triple. Hasta quince se anotaron finalmente en el partido. Perasovic, consciente de lo importante que es dosificar esfuerzos premió con descanso a Doellman y Lishchuk en los instantes finales. Los canteranos Larry Abia y Pablo Pérez tuvieron el premio y la oportunidad de jugar los últimos compases de un choque resuelto con más sencillez de la esperada y que refuerza a un grupo que ahora debe volver a mirar a Europa pero que dejó en tierras gallegas la impronta de un club grande y con ambición. El retorno de los lesionados se antoja importante pero la madurez con la que el equipo afronta los partidos endurece el nivel mental de cara al futuro. Ayer el Valencia Basket se hizo un poco más grande.

- Ficha técnica:

70 - Río Natura Monbus (24+13+13+20): Vassilis Xanthopoulos (-), Pavel Pumprla (8), Benjamin Dewar (6), Nick Minnerath (10), Mike Muscala (16) -cinco inicial-, Mario Delas (13), Micky García (-), Oriol Junyent (2), Durand Scott (4), Alberto Corbacho (7), Iñaki Sanz (2) y Rafa Freire (2).

102 - Valencia Basket (35+23+16+28): Sam Van Rossom (17), Rafa Martínez (10), Romain Sato (21), Justin Doellman (18), Serhiy Lishchuk (5) -cinco inicial-, Pau Ribas (8), Oliver Lafayette (13), Olekseiy Pecherov (8), Larry Abia (2) y Pablo Pérez (-),

Árbitros: Daniel Hierrezuelo, Juan Luis Redondo y Andrés Fernández. Eliminaron por faltas personales a Serhiy Lishchuk.

Incidencias: Partido correspondiente a la sexta jornada la liga Endesa disputado en el Fontes do Sar ante 5000 espectadores.