Es pieza fundamental en el equipo, la prolongación de Velimir Perasovic en la cancha, y se le está echando mucho de menos en estas últimas semanas. Pese a la contratación de Nemanja Nedovic o la evolución de Guillem Vives, es un hecho que el Valencia Basket necesita un plus más en la dirección del equipo. Un plus que se llama Sam Van Rossom.

El base belga sufrió el pasado 16 de noviembre una rotura muscular del glúteo mayor derecho durante el encuentro disputado en el Palau Blaugrana ante el FC Barcelona. Una lesión que le mantenido KO durante cinco semanas pero que ahora está a un pequeño paso de quedar olvidada. Al menos eso es lo que se desprende del entrenamiento realizado en la tarde del lunes en La Fonteta, donde Van Rossom se ejercitó por primera vez desde que cayó lesionado junto al resto de sus compañeros. Trabajó a buen ritmo, sin molestias y por espacio de unos cincuenta minutos en los que se empleó a fondo haciendo contraataques, balances defensivos e incluso ejercicios de uno contra uno. Únicamente se perdió por precaución la parte final en la que ya se trabajó cinco contra cinco y en la que era aconsejable reservarle debido a su falta de ritmo.

«Sólo he hecho una parte del entrenamiento ya que por ahora es mejor ir entrando poco a poco con el equipo», confesó el base belga a SUPER, que abandonó La Fonteta con muy buenas sensaciones después de esta primera toma de contacto con todo el equipo. Tanto es así que su objetivo pasa por estar listo para jugar este sábado ante el Gipuzkoa Basket. «La verdad es que tengo ya muchas ganas de volver a jugar y estar con todos mis compañeros. Mi intención es tratar de llegar al partido del próximo sábado en San Sebastián», confirmó.

Algo que dependerá en gran medida de su evolución en los próximos entrenamientos empezando por los dos que están programados para hoy. El equipo realizará una sesión de tiro y gimnasio por la mañana, y por la tarde otro nuevo entrenamiento técnico en La Fonteta. Ahí ya se empezarán a ver las posibilidades reales de Van Rossom que, si todo transcurre con normalidad, estará a disposición de Perasovic ante el Gipuzkoa Basket.

El técnico croata, desde luego, le espera con los brazos abiertos ya que a su juicio «es un jugador muy importante para nosotros». Con él y Lishchuk, al que aún le resta una semana más, piensa que el equipo dará «otra imagen». «Creo que podemos ir hacia adelante», dijo.