El Valencia Basket continúa su camino en la presente temporada a ritmo de récord y victorias. Este domingo llegó la 21ª consecutiva en el Nou Congost para certificar así un nuevo registro en la historia del club y confirmar una buena dinámica que ya invita a soñar con cosas más importantes en los próximos meses. Por el momento, récord, invicto y líder en todo lo que juega. Ahí es nada.
Y es que mucho era lo que estaba en juego al margen del récord, y el Valencia Basket lo sabía. Es por ello que los taronja demostraron desde el salto inicial que querían la victoria y que iban a hacer todo lo que estuviera en su mano para conseguirla. Tanto, que incluso el ICL Manresa se vio sorprendido por el ritmo impuesto por los de Pedro Martínez en los primeros compases (0-7; min. 2). El equipo valenciano era un auténtico vendaval y a Ibon Navarro no le quedó otra que parar el partido cuando apenas había transcurrido un minuto y treinta segundos del primer cuarto.
A partir de ese momento los locales ajustaron las líneas en defensa y eso dificultó algo más la productividad de los de La Fonteta, que aún así siempre encontraron soluciones para castigar el aro rival. Incluso en los peores momentos, cuando el conjunto catalán estrechó la diferencias al máximo liderado por un Musli muy activo bajo los aros (13-15; min. 7).
Pero el Valencia Basket ni se inmutó. Siguió fiel a su filosofía de juego y, en cuanto apretó un poco el acelerador en defensa, volvió a abrir las diferencias en el luminoso (13-23; min. 8). Si hasta entonces Diot y Rafa Martínez habían sido los protagonistas en el bando visitante, ese papel lo recogieron en el segundo cuarto Hamilton y Dubljevic.
Con los dos pívots al máximo rendimiento el cuadro taronja continuó mandando hasta el descanso son relativa comodidad. De hecho, de no haber sido por la irrupción de Chase Simon en el encuentro (9 puntos en el segundo cuarto) y que obligaron a Pedro Martínez a solicitar un tiempo muerto para ajustar la defensa sobre el alero norteamericano, la renta a la conclusión del primer tiempo podría haber sido mucho mayor (32-41; min. 20).
Algo que se confirmaría tras el paso por los vestuarios. Al igual que en el arranque, el Valencia Basket salió mucho más metido y no tardó en instaurar una máxima de 13 puntos (37-50, min. 24). El ICL Manresa trató de reaccionar viendo que el choque empezaba a escaparse, pero a productividad de Hamilton mantuvo a raya a los locales en cuanto, casi a la desesperada, volvieron a endurecer el juego. El partido era un toma y daca en ambas canastas pero siempre con los de La Fonteta por delante y marcando el ritmo del partido. Y es que más allá de las diferencias, siempre alrededor de los diez puntos, eran las sensaciones lo que realmente hacían impensable la derrota en el Nou Congost (48-62; min. 29).
El Valencia Basket, mucho más solidario en su juego, estaba siendo muy superior ante un Manresa que recurría una y otra vez al talento individual para aferrarse con uñas y dientes al encuentro. Sin embargo, ese no iba a ser suficiente argumento para contrarrestar la solidez y potencial de los de Pedro Martínez, que en el último acto volverían a instaurar otra máxima diferencia para dejar casi sentenciado el partido (51-67; min. 34). A partir de ahí ya sería un querer y no poder para el Manresa, que a contrarreloj buscó sin éxito la manera de recortar distancias para llegar al tramo final con opciones.
Ficha técnica:
62 - ICL Manresa (15+17+18+12): Thomas (2), Simon (18), Otverchenko (-), Sánchez (9), Musli (10) -cinco inicial- Grigonis (10), Hernández (6), Barrera (-), García (3), Sandul (4) y Montáñez (-).
74 - Valencia Basket (23+18+21+12): Diot (11), Martínez (3), Lucic (-), Sikma (4), Hamilton (19) -cinco inicial-, Vives (6), Dubljevic (17), San Emeterio (4), Stefansson (7) y Shurma (3).
Árbitros: Hierrezuelo, Pérez Nin y Mas. Sin eliminados.
Incidencias: Partido de la undécima jornada de la Liga Endesa disputado en el pabellón del Nou Congost ante 4.500 espectadores. El técnico visitante Pedro Martínez -en dos etapas entrenador del Manresa- fue ovacionado por la afición local, junto con el capitán valencianista, Rafa Martínez, también forjado en la cantera manresana.
