El Valencia Basket visitará la pista del MoraBanc Andorra en la décimo quinta jornada de la Liga ACB en la que medirá la inercia positiva que le empuja tras veinticinco victorias seguidas con la ilusión de los locales de entrar en la Copa del Rey.

El conjunto de Pedro Martínez se aseguró hace semanas tanto su presencia en el torneo copero como su condición de cabeza de serie en el sorteo de cuartos, por lo que su objetivo liguero desde entonces es ya a más largo plazo, aunque necesite ganar para mantener el liderato en solitario en la clasificación.

En cambio, el Andorra está inmerso en la lucha por las últimas plazas coperas. Actualmente es sexto pero con sólo una victoria más que el Unicaja, el Dominion Bilbao Basket, el ICL Manresa o el FIATC Joventut.

En la última semana, el equipo valenciano ha añadido dos nuevas victorias a su impoluto balance de esta campaña y en ambos casos, ante el Unicaja en la Liga el pasado domingo y frente al PAOK en la Eurocopa el miércoles, ha sido con más oficio que brillo y con un mejor papel defensivo que ofensivo.

Para el partido de Andorra, Pedro Martínez mantendrá las bajas del base Sam Van Rossom, lesionado en la rodilla izquierda, y del escolta Jon Stefansson, que se ha perdido los dos últimos encuentros por un bloqueo en la espalda, y tiene la duda de Luke Sikma por un golpe en la mano derecha.

La ausencia de los dos primeros ha obligado al técnico a retocar su rotación exterior, pues con Antoine Diot como base junto a Guillem Vives, sólo le queda un único escolta puro: Rafa Martínez.

Esta situación le ha llevado a hacer compartir minutos de pista a dos de sus tres aleros, lo que le ha supuesto algunos problemas en la defensa de jugadores exteriores pequeños de sus rivales, pero también le ha generado ventajas de la que tanto Fernando San Emeterio, como Vladimir Lucic o Romain Sato han sacado partido.

Esta será la tercera visita del Valencia al Andorra en la ACB. En la primera, en 1994, cayó derrotado pero ha ganado las dos últimas. La pasada campaña se impuso por un ajustado 64-65, en un duelo en el que dos tiros libres de Lucic inclinaron finalmente la balanza del lado visitante, aunque Betinho Gomes tuvo un tiro a falta de tres segundos que pudo haber cambiado el signo del encuentro.