Cuando se habla del nuevo alero del Valencia Basket, Vladimir Jankovic, es inevitable recordar a su progenitor, Slobodan Jankovic. Vladimir apenas tenía tres años cuando en 1993 durante un partido, su padre, por entonces la estrella del Panionios, protagonizó una de las imágenes más impactantes de la historia del deporte. Tras serle señalada una falta en ataque entró en colera y su reacción instintiva fue darse un brutal cabezazo contra el soporte de la canasta.

El problema es que donde normalmente se colocaba una protección acolchada había una barra de acero, lo que le dejó prácticamente KO sobre la pista. Aquel golpe le fracturó la tercera vértebra cervical, lo que le dejó tetrapléjico para el resto de su vida y puso fin a su carrera deportiva. Pese a quedar postrado en una silla de ruedas siguió ligado al baloncesto como entrenador y guiando los pasos de su hijo, Vladimir, hasta que en 2005 falleció a causa de un paro cardíaco.