El Valencia Basket rindió el mejor homenaje posible a los campeones de la Copa del Rey de 1998 recuperando la segunda plaza de la Liga Endesa tras un gran partido ante el Real Betis Energía Plus. De hecho, la superioridad local fue tan evidente que al descanso el choque estaba completamente finiquitado. Algo que, con sólo ocho jugadores profesiones disponibles, permitió a Txus Vidorreta dosificar al equipo y dar minutos de calidad a Hlinason y Puerto, además de Lluís Ferrando y hacer debutar a Álex Vera. Éste último, por cierto, se estrenó con un dos más uno que llevó al equipo hasta los 100 puntos.Ferrando puso luego la guinda con un triple y Puerto con un rebote para cerrar el partido por un contundente 103-67.

Desde el inicio el Valencia Basket dejó claro que no quería 'sustos' en este encuentro. Máxima concentración, gran actitud y sobre todo equilibrio en el juego. Armas más que suficientes como para decantar pronto la balanza a pesar de la resistencia inicial de Ryan Kelly (8-6; min. 4). Sólo fue un espejismo pues a partir de ese momento sólo hubo un equipo sobre la cancha; ese de blanco que tanto nos recordó al Pamesa Valencia que ganó el primer título de la historia del club en Valladolid hace veinte años.

Desde la defensa el equipo empezó a crecer con muy buenas decisiones en ataque y un alto porcentaje de acierto liderados por Will Thomas y Aaron Doornekamp (18-6; min. 7). Llegaban las rotaciones y con ellas el momento estelar de Tibor Pleiss, dominador en la pintura pese a la fascitis plantar que sufre. Lo peor para el Real Betis, sin embargo, estaba por llegar en el segundo cuarto (24-14; min. 10).

Y eso que arrancó con variaciones en la hoja de ruta local. Txus Vidorreta daba entrada a Tryggvi Hlinason, que en apenas dos minutos cometió tres faltas personales. A Pleiss, por tanto, le tocó regresar antes de lo previsto. El equipo, sin embargo, siguió jugando como un auténtico rodillo. El conjunto andaluz, pese a los esfuerzos de Óscar Quintana desde el banquillo, no encontraba la manera de frenar a un Valencia Basket absolutamente desatado. Y el partido, como era previsible, se acabó rompiendo (47-24; min. 17).

Llegó entonces la segunda falta de Pleiss y con ella la decisión de Vidorreta de jugar sin pívots ya que Hlinason tenía tres. Thomas ejerció al 'cinco' más cuatro pequeños (Sastre, Rafa Martínez, San Emeterio y Abalde). Era el fiel reflejo en la posta de la plaga de lesiones que viene asolando al equipo. Aún así, el Valencia Basket no sólo no se resintió sino que amplió su renta antes de llegar al descanso. Destacar los buenos dos últimos minutos de Josep Puerto en la rotación para dar descanso a San Emeterio (57-28; min. 20).

Una canasta, precisamente de San Emeterio, elevó la renta hasta los 31 puntos tras el paso por los vestuarios. El partido acabó ahí. Cualquier intento de reacción que pudiera esperarse del Real Betis murió en ese instante. Y más aún tras el parcial posterior de 13-1 liderado por Rafa Martínez, despedido con una gran ovación de la afición cuando se fue al banquillo (73-31; min. 24).

Era momento de cubrirse las espaldas y dar descanso a los hombres más justos en lo físico. Salieron Hlinason y Puerto, que cumplieron perfectamente con su rol a pesar de que el choque poco a poco fue bajando de intensidad y porcentajes en los de La Fonteta. Algo lógico teniendo en cuenta que el objetivo, al margen de cumplir esta última premisa, era dar minutos también a otros hombres que necesitan coger ritmo de competición como Joan Sastre tras varias semanas de inactividad. Con todo, buen partido del Valencia Basket que, con esta victoria, se coloca de nuevo segundo en la clasificación de la Liga Endesa tras el Real Madrid.