Menos de dos meses después de caer lesionado en el choque de Euroliga ante el Khimki, Sam Van Rossom está de vuelta. El belga se ejercitó en la mañana del martes 13 de marzo por primera vez bajo la atenta supervisión de Txus Vidorreta, que quedó prendado de su motivación, actitud y del positivismo que transmite al resto del grupo. Todo lo contrario a lo que se ha encontrado con Latavious Williams, por poner un ejemplo reciente. Latavious Williams,

Tanto es así que, pese a que se perdió parte del entrenamiento y no se quiso arriesgar en los ejercicios de cinco contra cinco, no está descartado que viaje a Belgrado con el equipo de cara al encuentro de este jueves ante el Estrella Roja. Este miércoles se tomará la decisión definitiva pese a que, es un hecho, todavía no está en condiciones de jugar.

Su presencia, no obstante, puede ir muy bien para elevar la autoestima y confianza de la plantilla, al tiempo que le iría introduciendo ya en la dinámica del grupo. Dependerá de su evolución en estos días si está ya para ayudar al equipo en la pista en el choque de este domingo ante el Iberostar Tenerife. Un partido de nuevo importante para mantener intactas las opciones en la Liga Endesa.

El base taronja sufrió entonces una triple fractura de vértebras sin desplazamiento y alarmó a todos al tener que ser evacuado en ambulancia de La Fonteta. Tres días después fue dado de alta, pero estuvo obligado a llevar corsé durante un mes antes de empezar a hacer trabajo de pista.

Una buena noticia para un técnico que, después de una temporada marcada por las múltiples lesiones en la primera plantilla, podrá contar en breve y salvo nuevas lesiones, con 13 jugadores profesionales disponibles a la espera del regreso de Antoine Diot, el jugador con un periodo más largo de recuperación después de que tuviera que pasar por el quirófano el pasado 20 de noviembre con una artroscopia para intentar solucionar los problemas que arrastraba en su rodilla izquierda.

Con Van Rossom, por su parte, no se quiere forzar lo más mínimo su regreso y más teniendo en cuenta su reciente historial de lesiones. Y es que antes de esta última lesión con fractura de vértebras, sufrió también un esguince en su tobillo derecho en noviembre, mientras que el pasado verano fue operado también en Bélgica por una grave lesión en su rodilla izquierda mientras el equipo disputaba los play-off por el título en los que acabó proclamándose campeón.