Pese a que los plazos con las instituciones no están discurriendo con la celeridad que al Valencia Basket le gustaría, lo cierto es que el club sigue dando pasos adelante y no ha variado su hoja de ruta en estos últimos meses con respecto a su idea de construir un nuevo pabellón en València. Tanto es así que, tras la última visita a Berlín para conocer las interioridades del Mercedes-Benz Arena, con capacidad para 17.000 espectadores y un coste de 165 millones de euros, ERRE Arquitectura tiene ya prácticamente definido el proyecto de la nueva instalación.

Fueron sus técnicos, acompañados por el propio Juan Roig, los que a principios de febrero sacaron conclusiones muy productivas de aquel viaje para acabar de perfilar una idea que se empezó a fraguar ya el pasado verano. Desde entonces hasta el día de hoy muchos han sido los pasos realizados por el club en diferentes frentes, uno de ellos en el máximo torneo continental.

En este sentido, SUPER ha podido confirmar la promesa de la Euroliga de celebrar la Final Four en València una vez haya concluido la construcción del nuevo Arena de la entidad taronja. Un compromiso firme y que viene a demostrar las buenas relaciones existentes hoy en día entre el club y Jordi Bertomeu, CEO de la Euroliga. Eso en el caso de que haya finalmente acuerdo con las instituciones municipales pues, en caso contrario, el club podría acabar decidiéndose por realizar la obra en alguna otra población cercana a la ciudad.

De esta manera la inversión de Juan Roig, que está dispuesto a financiar el proyecto con cerca de 160 millones de euros, para empezar daría a la ciudad casi a coste cero un importante impulso económico con la Final Four. Así ha sucedido en los últimos años en grandes ciudades como París (2010), Barcelona (2011), Estambul (2012 y 2017), Londres (2013), Milán (2014), Madrid (2015) o Berlín (2009 y 2016).

El problema principal, en este momento, es la falta de acuerdo en el Ayuntamiento de València, donde la concejala de Patrimonio, María Oliver (València en Comú), ya manifestó que su grupo es partidario de una concesión administrativa del suelo antes que de una venta. Aspecto este que desde el Valencia Basket no se contempla.

Tampoco ha sentado nada bien en el club la tasación de la parcela de 22.000 metros cuadrados realizada por los técnicos municipales y que supera los 50 millones de euros. Un cantidad que se considera desorbitada y que, en todo caso, habrá que cotejar con otras tasaciones complementarias.

Copa del Rey de la ACB

Otro retorno muy importante para València con la nueva instalación, al margen de entrar por fin en el calendario de grandes conciertos a nivel europeo, sería la posibilidad de albergar la Copa del Rey de la ACB. Aspecto en el que el club ha jugado también sus cartas para una pronta designación en el nuevo recinto.