Romain Sato está de vuelta... y busca equipo. El alero centroafricano quiere volver a jugar al primer nivel esta próxima temporada, y desea hacerlo en Europa. Preferiblemente en la Liga Endesa. Esa es la información a la que a día de hoy ha tenido acceso este periódico después de adelantar el pasado verano el paréntesis obligado en su carrera de manera puntual. La causa fue una delicada situación familiar que requirió su presencia en Estados Unidos mucho más tiempo del esperado en un primer momento.

Sato tenía por entonces una oferta firme de renovación del Valencia Basket, que esperó pacientemente mientras pudo su respuesta. Respuesta que habría sido afirmativa al cien por cien de no haber sido por ese condicionante familiar. Afortunadamente, ese problema quedó solucionado posteriormente aunque ya demasiado tarde para encajar en los planes de la entidad taronja.

Algo similar a lo que ha sucedido ahora, ya que los de La Fonteta han sido los primeros en conocer de la decisión del jugador de cara al próximo curso. Sin embargo, y aunque la noticia ha sido recibida con satisfacción, no hay sitio para él en una plantilla que ya cuenta en el ´tres´ con Fernando San Emeterio, Alberto Abalde y también con la polivalencia de Aaron Doornekamp.

La clave para su vuelta a las pistas, al margen del tema personal, está también en la resolución de un espinoso trámite administrativo. Y es que durante estos meses de inactividad le caducó el pasaporte centroafricano, documento sin el cual no podía actuar como ´cotonou´ en Europa. Salir en esas condiciones de EEUU era también un auténtico problema y la gestión en su país de origen la tuvo que realizar a través de un mediador. Los plazos fueron alargándose y el alero se quedó sin la posibilidad de volver a jugar antes de que concluyese la pasada temporada.

Esa era su idea inicial. Encontrar un equipo para disputar los últimos meses de competición y así demostrar que estaba en perfecta forma para comenzar esta temporada. De hecho, en todo este tiempo Romain Sato ha seguido un estricto plan de entrenamiento en Houston en el que combina el trabajo en el gimnasio con la pista.

Entonces no fue posible, pero ahora sí una vez ha logrado salvar la burocracia en la República Centroafricana y tener en regla su pasaporte. Por tanto, y si todo transcurre con normalidad, el 16 de junio de 2017 no pasará a la historia como el último partido oficial de Romain Sato. Aquel día no sólo conquistó la Liga Endesa con el Valencia Basket, sino que pasó a la historia como uno de los héroes de aquella final épica ante el Real Madrid.

Sin embargo, ese no es el adiós que quería el centroafricano. Sobre todo porque, tras un obligado año ´parado´ y sin lesiones de por medio, a sus 37 años aún se siente con ilusión, ganas y físico para seguir jugando. Y eso, viniendo de quién viene, es también una garantía de rendimiento vaya donde vaya.