Arranca la cuenta atrás para el inicio de la temporada 2018/19. Con el fichaje de Louis Labeyrie y la renovación de Will Thomas, el Valencia Basket cerró de forma definitiva su plantilla para el próximo curso, por lo que ya solo queda contar los días para el inicio de los entrenamientos -16 y 17 de agosto- y del primer partido de pretemporada -30 de agosto ante el UCAM Murcia en Alcoi-. Es, por tanto, buen momento para analizar cómo ha quedado el roster taronja de cara a un año que debe suponer un nuevo asalto a la Euroliga.

Empezando la casa por el tejado, las posiciones interiores han sido las últimas en cerrarse. Las incorporaciones de Louis Labeyrie y Will Thomas eran las dos últimas que faltaban para completar la rotación en la pintura, y el viernes ambas se confirmaron de una tacada. De esta forma, Jaume Ponsarnau, nuevo inquilino del banquillo de La Fonteta, cuenta cinco jugadores para dos posiciones, dos para cada una y un comodín llamado Labeyrie.

Los ala-pívots serán los mismos del año pasado. Continuidad, quizá la clave más destacada de esta plantilla 2018/19. Aaron Doornekamp y Will Thomas se complementan bien en el puesto de cuatro y este año contarán además con la ayuda de Louis Labeyrie. El francés, el único desconocido para la afición taronja, mide 2,08, pero su físico desgarbado y su atleticismo hacen que su posición natural sea la de cuatro. No obstante, conforme ha ido evolucionando en su carrera, ha ido jugando cada vez más de cinco, por lo que será un jugador 'a caballo' entre ambas posiciones.

En el puesto de pívot, como no podía ser de otra manera, Bojan Dubljevic volverá a ser la referencia. El montenegrino entra en su séptima temporada con el Valencia Basket y quiere volver a ejercer de líder como en la campaña del título de Liga Endesa, después de un curso pasado mermado por las lesiones. Para compartir la pintura con 'Dubi', regresa a La Fonteta un viejo conocido de la afición taronja. Mike Tobey, tras una temporada de crecimiento espectacular en el Iberostar Tenerife, vuelve a València para ratificar las buenas sensaciones que ofreció en las pocas oportunidades que tuvo a las órdenes de Pedro Martínez, hasta que una inoportuna lesión le apartó de las pistas. El norteamericano será el techo de la plantilla con 2,13 y viene a aportar defensa y rebote, pero también puede sumar en ataque.

Yendo de grande a pequeño, toca ahora el puesto de alero, para el que habrá dos jugadores fijos, más otros dos que eventualmente pueden jugar de tres. Fernando San Emeterio será la voz de la experiencia y Alberto Abalde la de la juventud, siendo dos jugadores de plenas garantías, internacionales ambos con España, y que dan una rotación sensacional en la posición. Ambos, además, poseen gran manejo de balón y capacidad de dirección, un plus muy valioso para el puesto. Joan Sastre y Aaron Doornekamp puede actuar de alero sin problemas si la situación lo requiere.

En el puesto de escolta, tres jugadores se repartirán los minutos, aunque de inicio serán dos pues Rafa Martínez tardará varios meses en estar a punto para volver a las pistas tras operarse de la rodilla. Matt Thomas, uno de los recién llegados, está llamado a asumir un rol protagonista desde el primer día, especialmente en ataque. Joan Sastre es el tercero en esta ecuación, aunque en cuanto a jerarquía tendrá la misma o más que sus dos compañeros de puesto ya que es un jugador ya veterano dentro de la plantilla; además de ser el jugador más polivalente de toda la línea exterior.

Por último, la posición de base es la única con overbooking, con cuatro jugadores para un puesto. Sin embargo, los problemas físicos de Antoine Diot, del que poco se sabe todavía en cuanto al estado de su rodilla, ha hecho que no se quieran correr riesgos; y más con la experiencia del año pasado. Guillem Vives y Sam Van Rossom son dos jugadores de garantías y de plena confianza para La Fonteta, mientras que Sergi García espera tener más protagonismo que el año pasado, al menos hasta que Diot esté al cien por cien. En definitiva, una plantilla para volver a ilusionarse.