El Valencia Basket sumó su tercera victoria consecutiva en la Eurocup en un encuentro igualado ante el Partizan (79-71) en el que tocó pelear hasta el final. El buen tercer cuarto de los locales fue nuevamente clave en un encuentro en el que volvió a echarse de menos una mayor regularidad del conjunto de Jaume Ponsarnau. Equipo que, por cierto, sigue liderando en solitario el grupo C del torneo continental.

Al igual que en sus últimas citas, no le fue fácil al Valencia Basket meterse en el encuentro. Gagic hacía daño en la pintura con relativa facilidad, al igual que Marinkovic desde el perímetro. Ponsarnau había optado de inicio por la pareja interior formada por Labeyrie y Tobey, junto a VIves, Matt Thomas y Doornekamp. El quinteto aguantó el tipo pese a que las sensaciones no terminaban de ser buenas (13-12; min. 7).

Llegaron entonces las primeras rotaciones con la incursión de Dubljevic y un desatado San Emeterio. El cántabro, a pesar de ser duda por un corte en la cara, salió con muchas ganas de agradar a su afición en su estreno oficial en La Fonteta esta temporada. Pese a ello, fue el Partizan el que mejor jugó esos minutos saliendo en velocidad a la mínima oportunidad (15-21; min. 8). Ponsarnau tuvo que pararlo.

Sus indicaciones surtieron efecto y el equipo reaccionó (20-21; min. 10), pero sólo de manera fugaz. Pese a la enorme superioridad en la pintura con Dubljevic y Will Thomas, a los taronja les costó demasiado hacerles llegar el balón aún a sabiendas de que eran canastas fáciles posteando bajo el aro (24-31; min. 14). Otra vez tocaba remar, y el Valencia Basket lo hizo.

Un 2+1 de Dubljevic y un alleyoop para Tobey fueron suficientes argumentos para despertar al equipo y a La Fonteta. El Partizan, pese a que continuó jugando con equilibrio y muchos fundamentos, comenzó por fin a pasarlo mal a la hora de anotar. Todo lo contrario que los valencianos que, tras imprimir una marcha más a su defensa, encontraron varias veces a Tobey bajo el aro. El parcial de 19-9 permitió a los locales darle la vuelta al partido e irse al descanso con una ligera renta (43-40; min. 20).

Sería un aviso de lo que vendría tras el paso por los vestuarios, con un Valencia Basket mucho más sólido para comenzar a estirar su renta de la mano de Dubljevic y Will Thomas (57- 44; min. 25). El parcial de 14-4 no dejaba lugar a la duda acerca de lo que estaba sucediendo sobre la pista. El Partizan había perdido toda fluidez en su juego producto de la buena defensa taronja, y eso fue aprovechado por los de La Fonteta para seguir creciendo en su juego. Algo que no estaba reñido con algún que otro error defensivo como la defensa de Matt Thomas sobre Paige al final del cuarto con sólo dos segundos de posesión (64-54; min. 30).Rotación

Ponsarnau, con buen criterio, decidió seguir repartiendo minutos entre sus hombres y eso también tuvo una consecuencia. Y es que el partido siguió vivo hasta el final (70-64; min. 36). El Valencia Basket se había colapsado de nuevo y el técnico de Tàrrega se vio obligado a pedir tiempo muerto para aportar soluciones. No fue fácil, ni mucho menos, e incluso tuvo que dar entrada a Van Rossom a falta de 1:28 para el final. Pero al final la victoria, y ya van tres en Eurocup, tuvo color taronja.