El Valencia Basket puso fin a su mala dinámica en la Liga Endesa tras sus derrotas ante el Baxi Manresa y el Monbus Obradoiro con una victoria in extremis en la pista del Delteco GBC. Victoria ajustada por 66-67 y en la que el colista de la ACB desaprovechó una renta de 10 puntos a cuatro minutos del final. Un momento crítico en el que la irrupción de Fernando San Emeterio resultó determinante para liderar un providencial parcial de 4-15 que, aunque permitió sumar un nuevo triunfo, no enmascara las malas sensaciones mostradas por el equipo.

Arrancó el encuentro con muchos errores por parte de ambos conjuntos. Tanto es así que desde el salto inicial hasta el triple de Dani Pérez que inauguró el marcador pasaron más de dos minutos. La tensión defensiva en las filas taronja estaba lejos de su mejor nivel y así se lo reclamaba Jaume Ponsarnau al equipo desde la banda. Un equipo en el que, en este inicio, tan sólo Louis Labeyrie se mostraba mínimamente resolutivo y efectivo en ataque (7-7, min. 5).

Todos los puntos del Valencia Basket hasta ese momento habían sido obra del ala-pívot francés, por lo que desde el banquillo decidieron tomar pronto cartas en el asunto. La entrada de Diot junto con Tobey le dio un nuevo aire a los de La Fonteta, que ya por entonces acumulaban hasta cuatro pérdidas. Un lastre que había que corregir cuanto antes (11-7; min. 7).

No iba a ser fácil, aunque lograría compensarse con el impulso de los hombres de rotación para después de un parcial de 0-7 recuperar la delantera en el encuentro (11-14; min. 9). Respondería el Delteco GBC liderado por una de sus nuevas incorporaciones, el escolta norteamericano Nick Zeisloft, cuyos triples en la primera mitad (4/6) fueron una auténtica pesadilla para el equipo taronja (19-14; min. 12).

El Valencia Basket respondió dándole a probar a los locales su propia medicina. Dos triples consecutivos de Vives y Tobey permitieron iniciar un parcial de 3-17 que puso las cosas muy de cara para los de Ponsarnau (22-31; min. 16). Parecía que los taronja podían romper incluso el encuentro en ese momento, pero nada más lejos de la realidad. En lugar de eso Bobrov, y de nuevo Zeisloft, estrecharon al máximo la renta (29-31; min. 19). Un espectacular mate sobre la bocina de Van Rossom tras una gran penetración permitiría al Valencia Basket irse al descanso cuatro puntos arriba (29-33; min. 20).

Arrancó bien la segunda mitad con un triple de Doornekamp para estirar un poco más la ventaja hasta los siete puntos (29-36; min. 21). Sólo sería un espejismo. La falta de solidez y consistencia dieron alas al cuadro guipuzcoano, que en el intercambio de canastas se mostró más efectivo liderado por Nevels. Algo a lo que ayudaron mucho también las facilidades defensivas de los taronja en la pintura y otros 'regalos' en forma de pérdidas (56-48; min. 32).

El partido se escapaba y los hombres importantes seguían sin aparecer. Por otra parte, sin una mejoría defensiva era casi inviable encontrar un punto de inflexión. Así debió entenderlo también Ponsarnau, que no esperó mucho más para pedir tiempo muerto y exigir una mejor respuesta a sus jugadores (62-52; min. 34). Quedaba un último tren en el partido y San Emeterio estaba dispuesto a cogerlo.

El alero cántabro, con nueve puntos en esos minutos -incluida la última canasta que significó la victoria-, resucitó a los taronja dándoles una vida extra que les puso uno arriba a 15 segundos del final (66-67). Una buena defensa en la siguiente jugada hizo el resto. El parcial de 4-15 resultó determinante.

- Ficha técnica:

66.- Delteco Gipuzkoa Basket (14+15+23+14): Dani Pérez (2), Newells (14), Salvo (10), Burjanadze (6), Sekulic (4)- cinco inicial- Maiza, Van Lacke, Barro, Salvo, Vobrov (12), Rebec (6), Zeisloft (12), Corbacho,

67.- Valencia Basket (14+19+15+19): Labeyrie (12), Van Rosson (8), San Emeterio (11), Will Thomas, Rafa Martínez (3)- cinco inicial- Diot, García, Vives (7), Tobey (13), Sastre (5), Matt Thomas (2) y Doornekamp (6).

Árbitros: Peruga. Aliaga y Baena. Sin eliminados

Incidencias: 2.762 aficionados se dieron cita en el Donostia-San Sebastián Arena.