Su última participación con el equipo fue en Manresa, hace ya más de un mes, y apenas 26 segundos. Una constante en la temporada de Sergi García, que vive entre el descarte técnico y una presencia casi testimonial en los encuentros disputados por el Valencia Basket. Su cesión a finales de diciembre, aunque valorada, quedó definitivamente aparcada sacrificando su progresión por el bien común.

Una decisión que ha aceptado con resignación, pese a saber que no es ni de lejos la mejor situación para él. «A todos los jugadores nos gusta ayudar al equipo desde la pista, que es donde se nos da mejor. Es verdad que somos un equipo amplio, el entrenador lo ha decidido así esta temporada e intento ayudar al equipo en todas las facetas que están en mi mano. No estoy muy acostumbrado a esto, pero me debo a este club y tengo que dar el cien por cien esté donde esté», apuntó.

El domingo, ante el UCAM Murciadespués de lo que han sido «unas semanas muy duras». «Las sensaciones en pista fueron un poco extrañas. He estado mucho tiempo fuera de la pista, y no sólo fuera de la pista sino sin entrenar con el equipo, sin tener esa sensación con los compañeros en el campo. Cuesta, sobre todo mentalmente», admitió el base mallorquín. «Al principio me costó un poco más, sobre todo físicamente porque quería ir a todo y en momentos que no hacía falta. El querer hacer más de lo que tocaba a veces no es bueno. A medida que pasaba el partido me fui encontrando mejor. La confianza se gana con minutos», explicó.

Y todo después de una semana en la que confesó haberlo pasado muy mal al ni siquiera poder viajar con el equipo a Lituania para la vuelta de los cuartos de final de la Eurocup. «Mentalmente es duro que te aparten, por así decirlo. El entrenador quiere tener a los doce jugadores concentrados sólo para el partido y nadie más. Se ha hecho así toda la temporada y no era de extrañar que se volviera a hacer así. Mentalmente hay que estar preparado y ayudar, y si hay que estar fuera de la pista dar el cien por cien siempre», aseguró.

«Hemos hablado de esta situación, pero para mí es algo nuevo», indicó en referencia a las conversaciones mantenidas con su técnico, Jaume Ponsarnau. «Nunca lo había vivido y tengo que adaptarme», subrayó. Es por ello que espera que para la próxima temporada desde el club sean francos con él, su rol quede definido de antemano y así se pueda actuar en consecuencia. «También lo quería esta temporada. Que dependas a veces de jugadores que no sepas si van a estar se hace difícil. Tener tantos jugadores en la misma posición y gente con mucho nivel complica las rotaciones», comentó el balear.

«A todos los jugadores nos gusta jugar, todos dicen que soy joven, pero es muy difícil. Lo más importante para un jugador es tener confianza y desde ahí sale todo», concluyó Sergi García, que esta temporada ha participado en 22 de los 41 partidos oficiales disputados por el Valencia Basket.

Cita a ciegas continental en La Fonteta antes de la 'Cremà'

El martes 19 de marzo es día de fiesta grande en València. Y también en la Fonteta, con el primer partido de las semifinales de la Eurocup. Un encuentro para el que todavía se desconoce el rival -saldrá del ganador del tercer partido de cuartos que enfrenta al Unics Kazan y al Lokomotiv Kuban Krasnodar que se juega mañana-.

Tampoco hay horario confirmado, aunque teniendo en cuenta los eventos falleros desde el club se trabaja para que se juegue a las 18 horas. Lo que es seguro es que será necesaria La Fonteta de las grandes ocasiones para comenzar a encarrilar el pase hacia la final de la competición continental.