El Valencia Basket está volcado de pleno en la confección de la próxima plantilla y en la llegada de nuevos fichajes para competir en un año con Euroliga, pero también en la renovación de algunos de sus jugadores claves, como es el caso de Guillem Vives.

El base catalán, de hecho, admite en declaraciones a SUPER que ya hay contactos entre las partes y que están en la misma sintonía, la de cerrar la renovación. «Sabemos cómo son estos momentos de negociaciones y renovaciones, la gente puede hablar más de lo que realmente es, pueden salir cosas que pueden jugar en tu contra, lo importante es estar tranquilo. Sé que el club me quiere, que tiene la intención de que yo siga en el proyecto. Hemos esperado hasta final de temporada para empezar la negociación, vamos a hablar las dos partes para ver cómo queremos afrontarlo y espero y deseo que vaya todo muy bien».

Y es que el base catalán confía plenamente en el proyecto de club y espera seguir formando parte de este crecimiento durante muchos años más. «Estoy muy a gusto, quiero seguir estando en este proyecto de crecimiento de club, donde me siento en conexión con los valores que transmite. Ya son cinco años, conozco mucho el club y sé dónde quiero estar. Quiero seguir. Pero acaba de empezar la negociación y vamos a ver cómo va. Es una negociación, hay que ver cómo actuamos las dos partes, al final queremos lo mismo y creo que llegaremos a un entendido que es lo que deseo».

De hecho, tal es la ilusión de Vives por seguir en el Valencia Basket que ya se imagina cómo sería llegar a jugar de taronja en el Valencia Basketnuevo pabellón. «Si pudiera jugar en el Nuevo Arena como jugador del Valencia Basket sería increíble. Es un proyecto muy ilusionante, viene un equipo que se ha ganado la Euroliga por méritos propios y con crecimiento de club cada año. Si siguiera estaría encantadísimo y con una motivación extra».

Eso sí, no quiere dar nada por hecho y espera que se pueda cerrar rápido el acuerdo con su agente. «Ya hemos hablado un poco y me he sentido querido, pero ahora toca hablar con mi entorno, ellos hablarán también lo suyo y ya veremos cómo acaba».

Vives cuenta también una anécdota con Rafa Martínez. «Siempre me ha dicho que yo llevo ganando un poco más de dinero desde más joven. Yo llegué muy joven y el otro día lo pensaba. Los cambios siempre son difíciles, pero mi cambio de Badalona a València tuvo unas repercusiones en mí como persona, pero si me voy a los cinco años atrás, al verano ese, no me arrepiento de nada de cómo fue todo, de cómo acepté la oferta rápido, de no pensármelo, de saber que Badalona es mi Badalona, pero que me iba a un club que no conocía nada, pero que iba creciendo mucho y el cariño que me transmitían era muy potente. No me arrepentiría nunca de haber fichado por el Valencia Basket», señaló el base catalán.

Del capitán añade que «diría que hasta en la ciudad se notará que no está Rafa, es ir por la calle con él y no poder respirar. Yo ya llevo años también, pero o me quiero comparar con Rafa en nada, él es otra dimensión de jugador y me quedo con todo lo que he aprendido de él en la pista, fuera, en los momentos buenos y malos, cómo gestionarlos emocional y anímicamente, cómo se puede perder protagonismo en la pista pero fuera ser el más importante, venir cada día a entrenar siendo el número 1. Ha sido y es el icono del Valencia Basket».