El Valencia Basket necesita firmar dos escoltas en el mercado antes de dar por cerrada la plantilla para el próximo curso. Una plantilla que será de 14 jugadores con el objetivo de afrontar con garantías todas las competiciones en las que el club estará inmerso, principalmente la Euroliga y la Liga Endesa, que obligarán a un enorme desgaste.

Una opción clara para cubrir estas vacantes es la de Darío Brizuela. A pesar de que el Movistar Estudiantes igualó la oferta taronja en el tanteo, desde La Fonteta no se da todavía por perdido al exterior de San Sebastián. De hecho, están a la espera de que los colegiales reconsideren su postura para poder cerrar la operación.

Este fin de semana, sin ir más lejos, el director deportivo taronja, Chechu Mulero, coincidió en Burgos con Willy Villar, director deportivo del Estudiantes, dentro de la segunda edición del Máster de Dirección Deportiva en Baloncesto -Máster DiDe-, organizado por Sport Coach Academy. Una buena ocasión, sin duda, para intentar acercar posturas.

Pero más allá de este frente, que continúa abierto, la entidad valenciana estudia otras opciones en el mercado. Una de ellas es el de Vanja MarinkovicVanja Marinkovic, jugador del Partizan de Belgrado. El escolta serbio, de 22 años, estaba también en la agenda del Olympiacos y el Unicaja aunque en ninguno de los dos casos ha habido acuerdo. Entre otras cosas porque todavía tiene contrato con el Partizan y su cláusula de salida es de 200.000 euros. Pero sólo hasta el 30 de julio.

A partir de esa fecha su contratación sería ya inasumible para el presupuesto del Valencia Basket. Marinkovic, de 1,98, metros y seleccionado en el último draft de la NBA con el número 60 por Sacramento Kings, promedió 12,4 puntos y 2,3 rebotes en la Eurocup y 12,2 puntos y 2,3 rebotes en la ABA Liga.