El Valencia Basket viaja a Serbia en busca de su primera victoria a domicilio en la Euroliga y lo hace después de haber recuperado las buenas sensaciones en La Fonteta. Sabe que tiene que dar un salto de calidad lejos de casa y Jaume Ponsarnsau confía en que pueda llegar este jueves en Belgrado.

"Nuestro salto competitivo, no tanto de calidad pero sí de energía, explosividad, ritmo o fortaleza defensiva, ha llegado en la Fonteta. Fuera de casa todo eso es más difícil y tenemos que encontrar más calidad. Hay que encontrarla y mejorarla porque en ambientes absolutamente adversos, lo necesitamos. Creemos que estamos mejorando pero aún nos falta un poco para consolidarla", señaló en rueda de prensa.

El técnico dijo que al equipo le "han venido bien los dos días de entrenamientos que han hecho para mejorar detalles, reconstruir cosas y crecer, que es algo necesario porque el resto también lo hace. Además, estamos todos bien físicamente excepto Sam Van Rossom y tenemos una buena mentalidad. Hay una cosa importante y es que estamos con alegría y eso es positivo para identificar la mentalidad competitiva del equipo", apuntó.

Respecto a la motivación especial que pueda sentir Vanja Marinkovic por medirse a un histórico rivalVanja Marinkovic suyo en su país, Ponsarnau destacó que "Vanja es un jugador que aparte de su calidad y proyección tiene mucho corazón y en partidos como el de mañana puede ser importante. Lo tiene y sabe como utilizarlo en esos ambientes así que nos puede ayudar mucho", apuntó.

Respecto al rival recordó que "han cambiado de entrenador, es el tercero que tienen, pero no ha cambiado su esencia y creemos que no lo van a hacer porque su valor competitivo más importante es su talento físico y su juego de uno contra uno".

Ponsarnau evitó pronunciarse sobre si podrán pelear por estar entre los ocho primeros. "Lo que está en nuestra cabeza es competir en Belgrado y dar ese paso de calidad para ser más solventes fuera de casa. Si lo hacemos, la situación nos llevará a donde nos llevé. La ilusión es llegar a lo más alto, pero hay que ir paso a paso", señaló.

El técnico admitió también que está preocupado por el mal momento de Joan Sastre, como se preocuparía "con cualquiera de los catorce", pero dijo que persistirá para tratar de incorporarlo a la rotación y que el jugador mallorquín también lo hará, aunque la necesidad competitiva hace complicado encontrarle minutos para crecer.