La cancelación de la Euroliga y la decisión de que repitan la próxima temporada los mismos 18 equipos que han disputado la presente edición, permite al Valencia Basket disputar por primera vez dos años consecutivos la máxima competición europea. Una oportunidad para seguir manteniendo un ambicioso proyecto con jugadores del máximo nivel, pero con el objetivo claro de repetir también en la temporada 2021/22.
Sin licencia A, solo la estabilidad de ser un habitual en la Euroliga permite mantener presupuestos ambiciosos y aspirar a fichar a jugadores del máximo nivel en Europa. Pero estando fuera del selecto grupo de 11 clubes accionistas de la competición, el Valencia Basket deberá ganarse en la pista su derecho a participar la siguiente temporada. Y de momento, ya sabe qué es lo que deberá hacer para lograrlo.
La Liga Endesa ya no da billete para la Euroliga ni ganándola y todo pasará de nuevo por clasificarse para el Top 8 de la competición y acabar por delante del Alba Berlín, el otro equipo que logró su billete el año pasado en su condición de finalista de la Eurocup, que ganó el Valencia Basket.
El club taronja, por tanto, tendrá el mismo objetivo que esta temporada en la próxima Euroliga. Ahora estaban décimos a solo una victoria del octavo clasificado, pero la cancelación de la Euroliga les ha impedido luchar por el objetivo en las seis jornadas que restaban de la Fase regular.
Sin poder acabar tampoco la Eurocup, no hay ningún otro club de la segunda competición europea que pueda reclamar su plaza como finalista, de ahí que el Valencia Basket haya logrado asegurarse al menos un año más en la Euroliga. Y esperan que no sea el último en los proximos años, con el Valencia Arena en el horizonte.
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