La irrupción en el terreno positivo de jugadores como Alberto Abaldeey durante la Fase Final de la Liga Endesa, tuvo también su polo opuesto con otros hombres que no estuvieron a su mejor nivel. El más claro ejemplo fue Bojan Dubljevic. El pívot montenegrino, que hasta la suspensión de las competiciones venía firmando una muy buena temporada temporada, apenas puedo ayudar al equipo en el último tramo debido a unos problemas físicos que le dejaron muy mermado de cara a esta cita.

Problemas que, pese a que se vienen repitiendo en la misma zona en estos últimos tiempos, tuvieron en el período de confinamiento un inesperado germen de incubación. Nos referimos al tendón de Aquiles de su pierna izquierda, una zona delicada que hay que controlar continuamente y al que la parada obligada con la imposibilidad de trabajar en la pista durante tanto tiempo no le sentó nada bien. Sobre todo porque el regreso a la actividad necesitó de una exigencia que esa zona no pudo soportar.

De ahí vino la irritación y unas dolorosas molestias que le llevaron a promediar apenas 6,6 puntos, 4,5 rebotes, 1,1 asistencias y 9,3 de valoración en algo más de 16 minutos de media por encuentro. Y es que, a excepción del encuentro ante el Casademont Zaragoza -11 puntos y 9 rebotes para 18 de valoración-lo cierto es que sus estadísticas estuvieron muy alejadas de las habituales debido a ese importante lastre físico con el que afrontó la competición.

Por eso uno de los objetivos en estas semanas dentro de los servicios médicos del Valencia Basket es conseguir recuperar al mejor Dubljevic de cara al próximo curso. Por este motivo ha estado siguiendo un tratamiento con factores de crecimiento, al margen de otra serie de medidas que también ha tenido que incorporar a su período vacacional -ejercicios con una carga progresiva, pautas nutricionales...-encaminadas a mejorar el talón de Aquiles.

Una zona que, a día de hoy, ofrece una preocupación muy relativa en el Valencia Basket ya que durante la temporada, más allá del factor excepcional que supuso el tramo final de la Liga Endesa, había tenido un comportamiento muy bueno. Es por ello que no hay una gran alarma con el problema que arrastra del montenegrino, aunque sí una vigilancia máxima para evitar los problemas que sufrió el pívot en el pasado.

Problemas que en anteriores ocasiones le llevaron a someterse a un innovador tratamiento en Alemania a cargo de un médico especialista en este tipo de lesiones. Entonces, logró recuperar la zona dañada mediante una serie de infiltraciones ‘naturales’ que ayudaron a regenerar este mismo tendón. Afortunadamente, en esta ocasión no será necesario nada de esto pues, en opinión de los servicios médicos taronja, la gravedad de la patología no es comparable. En este sentido, el optimismo es total a la hora de vaticinar que Bojan Dubljevic regresará a València en perfectas condiciones para la pretemporada.

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