El Valencia Basket suma y sigue y, tal ycomo ocurrió ante el Andorra, cerró su segunda victoria de la temporada en un último cuarto en el que aumentó su intensidad defensiva para lograr un parcial de 0-10 que sentenció el partido.

La superioridad en el rebote y los buenos porcentajes de tiro permitieron al Valencia Basket tomar el mando del partido después de unos primeros minutos de intercambio de canastas.

Vives, sin minutos el viernes ante el Morabanc Andorra, salió de inicio junto a Sastre, Kalinic, Derrick Williams y Bojan Dubljevic. Y suyos fueron los primeros puntos con un 2+1 al que respondió de inmediato Guillem Joy.

El acierto de Joesaar puso por primera vez a los de Pedro Martínez por delante (8-5), pero Derrick Williams desde la línea de tiros libres, Kalinic y siete puntos consecutivos de Dubljevic permitieron a los taronja recuperar la ventaja en el marcador, que se mantuvo ya hasta el final del primer cuarto (23-29) pese al acierto en el tiro exterior de los locales.

Un triple de Juampi Vaulet dio alas a los locales en su intento de acercarse al Valencia Basket, pero un 2+1 de Hermannsson y el acierto de Prepelic y los interiores, Labeyrie, Tobey y Dubljevic, permitió a los taronja mantener e incluso aumentar la diferencia antes del descanso, al que se llegó 40-48 tras un último parcial de 0-5 para los de Ponsarnau.

La cómoda ventaja se esfumó en un visto y no visto en la segunda parte ante un Valencia Basket que salía con el mismo quinteto inicial, pero con menos intensidad que en la primera parte.

Eatherton, Pérez y Hinrichs ponían a los de Pedro Martínez a solo un punto (49-50) y aunque Dubljevc logró cambiar la inercia con un nuevo triple, solo San Emeterio y Hermannsson veían aro con facilidad ante un Manresa coral que llegó al último cuarto con tres puntos de ventaja (68-65) y con muchas mejores sensaciones que los taronja.

Llegaba la hora de la verdad y, al igual que en el partido ante el Andorra, el Valencia Basket puso una marcha más para lograr un parcial de 0-10 que dio la vuelta al marcador y le dio la segunda victoria por 74-82. Y todo con el acierto de San Emeterio y un Joan Sastre que se consolida en el quinteto inicial y con un rol importante tras una temporada anterior complicada.

La precipitación en el tiro exterior de los locales puso el resto en un partido que permite al Valencia Basket afrontar con más confianza el próximo debut en la Euroliga. Y todo en una jornada en la que Ponsarnau se permitió el lujo de dar descanso a un base, en este caso a Van Rossom.