Pocas veces podrá disfrutar el Valencia Basket de un partido más cómodo. El Acunsa GBC apenas pudo inquietar en los primeros minutos a los taronja y la superioridad local respecto al colista quedó patente desde mitad de primer cuarto para dispararse hasta el definitivo 101-75 que deja a los de Ponsarnau con un pie en la Copa del Rey.

Faggiano, Radoncic con un triple y Echenique pusieron por delante a los visitantes en los primeros instantes (2-7), pero no fue más que un espejismo. Prepelic y Kalinic hacían reaccionar a los taronja y pese a un nuevo triple de Dee, Dubljevic puso por primera vez por delante a los de La Fonteta con un 14-13.

A partir de ahí, la brecha solo fue creciendo, con canastas de San Emeterio, Van Rossom y Tobey, pero sobre todo con un Hermannsson que sigue en estado de gracia y que cerró el primer cuarto con dos triples consecutivos, antes de uno final de Derrick Williams desde ocho metros.

El partido ya estaba roto con 30-16 y a pesar de una canasta de Echenique para abrir el segundo cuarto, el festival taronja desde la línea de 6,75 acabó de hundir las esperanzas de los de Marcelo Nicola. Con dos triples de Josep Puerto y otros de Hermannsson, Sastre y Derrick Williams, los de Ponsarnau sumaban 49 puntos en apenas 15 minutos.

La defensa del Acunsa hacía aguas por todas partes y los buenos porcentajes de tiro de los locales permitían hasta bajar la intensidad defensiva sin que ello se notara en el marcador, hasta llegar a un espectacular 63-38 al descanso, sin ningún tiro libre en los primeros 20 minutos, algo más que significativo de la falta de dureza en un partido roto desde el inicio.

Echenique de nuevo abría el tercer cuarto, antes de que la diferencia aumentara hasta el +30 para los locales (70-40), con Williams inspirado en el tiro y un Mike Tobey imparable en la zona que se sumaba también al festival triplista . Pero con tanta diferencia en el marcador, era inevitable bajar la intensidad, lo que se tradujo en un ajustado 21-18 antes del último cuarto, que empezó con un cómodo 84-56.

Como en los tres primeros cuartos, Olaizola abrió el marcador para los visitantes con un triple, pero la respuesta taronja fue contundente con canastas de Hermannsson, San Emeterio y un triple de Prepelic (91-59). De ahí hasta el final, el intercambio de canastas no alteró el resultado de un partido que quedó encarrilado ya en la primera parte y que acerca a los taronja a la Copa del Rey.