Llegados a este punto de la temporada toca comenzar a planificar los movimientos de cara al próximo curso. A nadie escapa que, aunque en el Valencia Basket la política habitual es esperar a que concluya la temporada, hay cuestiones que es obligado tratar semanas antes. Una de ellas sería la renovación de Nikola Kalinic, al que va a ser difícil convencer para continuar vistiendo de taronja el próximo curso.

Es, sin lugar a dudas, uno de los grandes peajes de haberse quedado fuera del Top-8 de la Euroliga. Y es que salvo invitación del máximo torneo continental -opción a día de hoy muy improbable- el Valencia Basket está abocado a disputar la próxima edición de la Eurocup. Un torneo que presentará novedades importantes pero cuyo atractivo no da la sensación de que vaya a ser suficiente para retener a uno de los mejores aleros en el viejo continente. Prueba de ello son las firmes intenciones del Real Madrid en hacerse con sus servicios de cara a la próxima temporada.

El equipo dirigido por Pablo Laso, tras la marcha de Gabriel Deck a la NBA -fichó por Oklahoma City Thunder al concluir la fase regular de la Euroliga- se ha quedado huérfano en el puesto de ‘tres’. Además, si como indican las previsiones cuenta con una elección alta en el draft, todo apunta a que Usman Garuba también podría dejar el club ‘blanco’ este verano.

Las circunstancias obligan al Real Madrid a moverse rápido en el mercado, algo que ya ha hecho para reforzar la posición de base tras cerrar un acuerdo con Thomas Heurtel y Pierria Henry. Kalinic parece pues el siguiente de la lista, y desde la capital de España se habla ya de un contrato de dos temporadas a razón de un millón de euros por cada una de ellas. Ahora bien, hay un importante obstáculo para que el deseo del club ‘blanco’ llegue a consumarse. Ese obstáculo se llama Valencia Basket y una normativa denominada ‘derecho de tanteo’. O lo que es lo mismo, los taronja pueden retener al jugador incluyéndolo en el tanteo e igualando cualquier oferta de un club español que llegue por él.

Una baza que el Valencia Basket siempre ha utilizado pero que, por si quedaba alguna duda, José Puentes confirmó hace unas semanas que volverían a hacer efectiva. «Con los jugadores que puedan tener una opción de salida la tenemos controlada y podemos ejercer nuestros derechos en España», aseguraba el director general y consejero delegado del club en una rueda de prensa en L’Alqueria del Basket. Frase a la que, sobre todo, se le puede poner nombre y apellido. El de Nikola Kalinic. Es un hecho que desde la entidad taronja ejercerán sus derechos, por lo que si el Real Madrid cierra finalmente un acuerdo con el alero serbio deberá también llegar a otro con el Valencia Basket para que renuncie a los mismos.

Ya lo hizo en los casos, por ejemplo, de Pau Ribas y Víctor Claver. Fueron alrededor de 200.000 euros por el primero y unos dos millones por el segundo lo que tuvo que desembolsar el Barça para poder incorporarlos a su plantilla. Lo hará también el Real Madrid con el TD Systems Baskonia para firmar a Henry este verano y al que pagará cerca de 500.000 euros. Y lo tendrá que hacer también si quiere ‘pescar’ a Kalinic.

De lo contrario, se arriesga a que los taronja igualen esa oferta y acaben reteniendo al jugador. Habrá que ver, por tanto, si asistimos o no a otro culebrón estival entre ambos clubes. Y es que las negociaciones entre el Valencia Basket y el Real Madrid, en este sentido, nunca han sido fáciles. Las tentativas ‘blancas’ por hacerse con los servicios de Nando De Colo o el propio Víctor Claver son el mejor ejemplo. En ninguno de los dos casos hubo acuerdo, por lo que el club que preside Florentino Pérez ya sabe a lo que se enfrenta.

Números

Nikola Kalinic ha sido, y sigue siendo, uno de los grandes referentes del Valencia Basket en la presente temporada. En la Euroliga ha disputado un total de 34 partidos con unos números de 10,4 puntos, 3,4 rebotes, 3,2 asistencias y 12,3 de valoración por encuentro en algo más de 26 minutos sobre la pista. En la Liga Endesa, el serbio acumula un total de 33 partidos con promedios de 9,6 puntos, 3,6 rebotes, 2,8 asistencias y 12.5 de valoración en casi 23 minutos de juego. Datos estadísticos a los que habría que sumar los ‘intangibles’ que proporciona sobre la cancha y que hacen de él un jugador fundamental para cualquier equipo.

Precedente

El precedente más reciente entre ambos clubes lo encontramos este pasado verano con el fichaje de Alberto Abalde, aunque hablamos de un movimiento muy diferente. En este caso no hubo negociación, ni falta que hacía. El Real Madrid sabía que si quería hacerse con el gallego debía abonar su cláusula de rescisión de 1,5 millones de euros... y eso es lo que hizo el jugador tras asegurarse un contrato por cinco temporadas que compensase ese desembolso.

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