Objetivo cumplido, de rebote. El Valencia Basket no cumplió con su deber y se dejó sorprender por el Río Breogán en La Fonteta, pero la derrota del UCAM Murcia en el Palau certificó la octava plaza de la Liga regular y el lunes podrán disputar el primer partido de cuartos de final ante el Barcelona. Una carambola que, eso sí, no fue suficiente para la afición taronja, con pitos en momentos concretos del partido y con algunos aficionados abandonando el pabellón sin esperar a los últimos segundos, en los que Jones pudo empatar el partido con un lanzamiento de tres que no entró.
Sin Jared Harper de nuevo y con el recién llegado Guillem Ferrando tras su cesión al Albacete para completar el roster, Álex Mumbrú apostó de inicio por Chris Jones, Jonah Radebaugh, Josep Puerto, Jasiel Rivero y Bojan Dubljevic. Un quinteto de lujo que, sin embargo, no logró hacerse con el mando de un primer cuarto que empezó con un triple de Nenadic.
Dubljevic y Jasiel, con cinco puntos cada uno, mantenían al Valencia Basket por delante en el ecuador del primer período (10-8), aunque la mayor ventaja para los locales llegó tras un parcial de 10-2,con un triple y un 2+1 de Jones, para poner el 20-12. Una ventaja que se esfumó en menos de dos minutos, con un parcial de 0-6 para un Breogán liderado por Quintela, que buscaba constantemente entrar hasta el aro y forzar faltas.
Individualidades del rival
Con 20-18 arrancó el segundo cuarto ante un rival que llegaba sin asistencias, pero con superioridad en el rebote y con pleno de aciertos desde la línea de tiros libres (6/6).
Happ no tardaba en empatar el partido y pese a la rápida respuesta de Webb con un mate, el pívot visitante volvía a anotar antes de que Quintela pusiera por delante al Breogán. Costaba ver aro en ambos equipos y aunque los taronja volvieron a ponerse por delante por medio de Prepelic y Alexander , un triple de Hollatz llevó a Mumbrú a parar el partido. Un triple de Prepelic y otro posterior de Dubljevic daban oxígeno a los taronja, pero los locales no pudieron mantener la ventaja en el marcador y se fueron al descanso 34-36 tras una última canasta inverosímil de Nenadic a una mano pisando la línea de tres.
Una floja primera parte preocupante, que obligaba a mirar de reojo el partido del Palau, donde el Barcelona hacía un favor a los taronja ganando de 15 al UCAM Murcia (41-26).
El paso por vestuarios, sin embargo, pareció sentar bien a los locales, que en apenas dos minutos lograron un parcial de 8-0 con canasta de Webb y Jasiel, al margen de un triple de Jones. Con 41-36, Mrsic paró el partido y volvió a cambiar la dinámica del partido, gracias al acierto de Hollatz y Happ, al margen de un triple de Nakic.
Los pitos empezaban a dejarse oír en La Fonteta pese a que el Barça seguía ganando de 16 y aunque los de Lugo no lograban romper el partido, Quintela se convertía en una pesadilla para los locales (53-56). Hermannsson reducía diferencias, pero los visitantes se mantenían arriba tras un intercambio de canastas entre Sergi García y Prepelic.
Con opción de empatar hasta el final
El esloveno y Jones eran las esperanzas de los locales, ayudados por un triple de Webb, pero la defensa taronja hizo aguas en el cuarto decisivo y Happ y Hollatz, con un triple, dejaron contras las cuerdas a los de Mumbrú a falta de 13 segundos (74-80).
El tiempo muerto obligado hacía que parte de los aficionados fueran abandonando La Fonteta, pero el Valencia Basket aún buscó el milagro tras un triple de Radebaugh (77-80). Una pérdida de los visitantes en el saque aún permitió buscar un triple para empatar, pero el lanzamiento de tres de Jones no entró y el Breogán se llevó la victoria. Por suerte, el Barcelona, próximo rival, derrotó al UCAM Murcia 86-57. La clasificación estaba en el bolsillo, pero la afición se fue con un malestar que dejó patente, unos con pitos y otros con indiferencia.