La lesión de Jasper Cillessen en el sóleo significa un obstáculo importante en el camino que el Jasper CillessenValencia CF de aquí al 5 de octubre, día fijado para el cierre de la ventana de verano. Desde el club siempre se ha aludido al traspaso del portero de la selección oranje como el objetivo marcado en rojo para poder aligerar costes de plantilla y, al mismo tiempo, activar con ello la posibilidad de hacer una inversión superior a la de una cesión. Las semanas de baja que tiene por delante el holandés complican esta cuestión, y el Valencia sigue ciñendo sus necesidades inmediatas a la fórmula del préstamo, con opción de compra a futuro o sin ella.
Además, en el caso Cillessen la mala fortuna se alía contra un Valencia incapaz de poner en marcha las altas tras seis bajas confirmadas: Garay, Parejo, Coquelin, Ferran Torres, Rodrigo y Piccini. El ex meta del Ajax regresó tocado de la selección después de haber cumplido con nota en el escaparate de la UEFA UEFANations League en hacerse con sus servicios en la Premier o la Bundesliga. Ahora, los próximos días se presentan decisivos para saber cómo se actualizan las opciones reales de salir con la lesión por delante. La rotura muscular que padece podría alargar su baja hasta el mes y medio.
Al mediodía, el Valencia emitió un parte médico conjunto sobre el estado físico tanto de Jasper Cillessen como de Jason Remeseiro. En el caso concreto del neerlandés decía lo siguiente: «El guardameta Cillessen se retiró del entrenamiento del miércoles por molestias en la cara posterior de la pierna izquierda. Las pruebas realizadas han mostrado una lesión fibrilar que le mantendrá apartado del resto del grupo hasta el alta médica». Precisamente, el portero de 31 años padeció ya una lesión similar en el gemelo a principios de diciembre frente al mismo rival del domingo noche en el estreno de la Liga. Jasper estuvo entonces cerca de un mes de baja por esta lesión, aunque no volvió hasta finales de febrero porque encadenó nuevos problemas en la cadera.
El alto valor estratégico que otorga el Valencia a la marcha de Cillessen -jugador con mayor consumo en el balance del Fair Play financiero entre su salario y la amortización de un fichaje que entró en el balance contable de este curso con un precio de 35 millones- se resume en el hecho de que, al menos hasta el cierre del mercado, la titularidad en la portería iba a quedar en manos de Jaume Domènech. Una manera de hacer ver al ex del Barça para la situación financiera.
Frenazo por razón económica a la opción Pezzella
De hecho, la semana pasada, tras la venta de Rodrigo, Anil Murthy informó a Javi Gracia y Miguel Corona que la inversión en fichajes estaría prácticamente bloqueada hasta una venta de Cillessen. El lunes en un nuevo cónclave el técnico insistió solicitando, a bajo coste, la incorporación de su hombre de confianza en el Watford, Étienne Capoue. El hecho posterior de desprenderse de la ficha de Piccini, cedido con opción de compra a la Atalanta, alimentaba cierto optimismo en el intento de traerse a Capoue, junto a las buenas perspectivas de un traspaso de Cillessen que permitiría ir a por otras piezas necesarias. Hoy, la vía Pezzella, especialmente tras la lesión del neerlandés, ha sufrido un frenazo. En este escenario, las cesiones ganan enteros para solucionar la urgencia en el mediocentro y el centro de la defensa.
