Fran Navarro acudió al rescate en el último suspiro para darle al Valencia Mestalla La Nucía salió mejor en los compases iniciales y lo aprovechó para marcar un gol que se dedicaría a defender con uñas y dientes durante más de una hora de juego. Óscar Fornés, de hecho, se vistió de héroe bajo los palos y lo paró casi todo, incluido un penalti, para desesperación valencianista. Cuando el partido parecía perdido, el delantero de Pinedo consiguió romper la muralla anotando su quinto tanto de la temporada y poniéndose pichichi del grupo días antes del compromiso de Copa en Terrassa.

La Nucía entró más viva en el partido, probando a Unai en el minuto ocho y lanzando un aviso serio de ir a por el encuentro. Dos minutos más tarde se adelantaba en el marcador desde los once metros, el colegiado señaló un agarrón de Emana sobre Forte en el área y Fofo convertía sin ponerse nervioso en su partido número cien con la camiseta nuciera. El tanto dejaba un poco grogui al Mestalla y los locales estuvieron a punto de ampliar el margen con un tiro al larguero que, esta vez sí, espoleó un poco a los valencianistas para reaccionar.

Los de Óscar Fernández se fueron adueñando de la pelota y haciendo retroceder varios metros al bloque alicantino. El equipo valencianista fue creciendo, generando combinaciones en campo contrario y llegando con más peligro. Emana probó con un cabezazo, Hugo González envenenó una falta cerradita y Koba lo intentó desde la frontal, pero ninguno encontró el gol del empate a pesar de dejar patente la reacción de un equipo que se fue al descanso con la sensación de haber ido de menos a más durante el primer acto.

La segunda mitad tuvo al Mestalla como gran dominador en busca de empatar la contienda. Jesús Vázquez fue el primero en probar suerte, primero en un tiro al lateral de la red y posteriormente tras una gran combinación con Emana que acabó con un paradón de Fornés. El portero de la Nucía empezaba a hacerse enorme bajo palos y minutos más tarde atajaba con una genial estirada el disparo de Gozálbez.

El cuadro blanquinegro buscaba con insistencia el gol del empate, pero la Nucía se defendía con mucho orden y seriedad de los envites visitantes, que siempre que lograban encontrar alguna grieta en el sistema defensivo del equipo de César Ferrando se encontraban con el mismo protagonista: Óscar Fornés. Parada tras parada amargaba el choque a los valencianistas una y otra vez, resolviendo con éxito todas las situaciones, incluso le detuvo un penalti a Carlos González a algo más de tres minutos para el final que parecía amarrar la victoria para los suyos.

Pero el fútbol aún le concedería una más al Mestalla y el balón largo de Adri Gómez llegó a parar a los pies del máximo goleador de la categoría, Fran Navarro, que metía la bota para conseguir lo que parecía imposible: batir a Fornés y rascar un punto del choque. El gol no estuvo exento de polémica, pues el linier alzó el banderín, pero el colegiado dictaminó que el punta de Pinedo estaba en posición legal y el tanto subió al marcador. El tiempo de alargue estuvo marcado por la tensión, lo que acabó con la expulsión de Menargues y Villafaina.