Lo dijo el viernes Voro, y así ha sido a lo largo de la temporada. El Valencia CF ha sido un equipo honrado, un grupo de jugadores no sospechoso de bajar los brazos. Esta tarde, más allá de los resultados de una temporada para el olvido, los futbolistas tienen la oportunidad de mantener en lo alto la imagen de dignidad y profesionalidad ofrecida de principio a fin. En la última jornada Elche, Valladolid y Huesca, rival de los blanquinegros, se juegan la vida. Solo puede quedar uno y el equipo de Voro se ha propuesto competir como hasta ahora con el objetivo de no interferir en favor o en perjuicio de ninguno de los tres contendientes por un único salvavidas en la élite.

Además, el Valencia pondrá en juego su propia dignidad. Esa que se centra en evitar que la actual acabe no solo como la peor de las temporadas desde que Peter Lim gestiona el club desde Singapur, sino, sobre todo, en tratar de sortear la campaña con el rendimiento más pobre en los últimos 25 años. Un propósito, el de los 45 puntos, que se une al de enlazar por vez primera dos victorias.

El Valencia, curiosamente, será juez en la batalla final por la salvación frente a un rival en el que juega su objeto de deseo para el ataque. El hombre que podría sustituir a Maxi Gómez si, finalmente, el uruguayo forma parte de la nueva serie de jugadores que Lim expondrá a precio de saldo en el mercado. Rafa Mir. El murciano, que pasó por la factoría de Paterna, está deseoso de cumplir dejando al Huesca en Primera y aterrizar en València. Sin embargo, antes la entidad de Mestalla y el Wolverhampton deberían alcanzar un entendimiento en una negociación con varios frentes abiertos como Kang In Lee y, principalmente, Gonçalo Guedes.

Justamente el extremo portugués, que ha conseguido el objetivo personal de viajar con Portugal a la Eurocopa, puede ser uno de los titulares que descanse hoy en Huesca. La buena actitud del equipo durante todo el curso hace creer firmemente a Voro que en esta última jornada podrá conjugar descansos para los futbolistas con más minutos, y con un ojo en la Euro, con oportunidades para algunos de los que menos han participado, sin que todo ello merme el rendimiento ni el poder competitivo del colectivo en El Alcoraz.

En principio, las rotaciones comenzarían por la portería con el regreso de Jaume Domènech, que no ha jugado desde que Cillessen volvió recuperado de un esguince de rodilla ante el Barcelona cuatro partidos atrás. En la defensa de cinco de Voro, herencia del epílogo de Gracia ante el Barça, el portugués Ferro puede ser titular, igual que Toni Lato en el lateral izquierdo. En la zona de medios hay descanso para Wass y un sitio para Racic al lado de Carlos Soler y Kang In. Arriba, la despedida de Gameiro le abriría la puerta para acompañar a Maxi Gómez en lugar del mencionado Guedes.

El Huesca, por su parte, focaliza todas sus energías en ganar al Valencia para no tener que mirar a otros campos. Aparte del triunfo, que lo mantendría seguro en La Liga, al cuadro oscense le valdría un empate si el Elche no le gana al Athletic o, incluso, la derrota si los ilicitanos perdiesen y el Valladolid no se impone al Atlético. El equipo de Pacheta tiene el golaveraje particular ganado con sus dos rivales por un sitio en Primera.

El dolor de cabeza del entrenador de los azulgrana son las bajas de Javi Galán, lateral zurdo, y el delantero Dani Escriche, ambos sancionados. Además, hasta el final mantendrá la duda de Vavro.