Novena titularidad de Maxi Gómez en la temporada y el uruguayo vuelve a terminar el partido sin cumplir su función principal, marcar goles. La primera parte en ataque del Valencia fue mala, pues no tiró ni una vez a puerta, aunque tácticamente hablando la idea ofensiva fue diferente comparado con otros partidos. Y lo cierto es que esta idea no funcionó.

Las dos armas en ataque siguieron siendo Maxi y Guedes, pero esta vez, como bien señaló José Bordalás en rueda de prensa, los valencianistas buscaron al charrúa dentro del área, lugar de donde provienen gran parte de los goles. Pese a esto, en los primeros 45 minutos el delantero no tuvo suerte y no pudo anotar.

Desde los primeros minutos ya se pudo ver como el atacante se situaba en el área a la espera de un pase para poder rematar el balón. De hecho, la más clara la tuvo a los cinco minutos del partido en una jugada a balón parado donde recibió un pase en el punto de penalti el cual pinchó de manera perfecta, pero que no pudo rematar, ya que se le fue un poco largo el balón y acabaron robándoselo.

Los siguientes minutos la idea de Maxi seguía siendo la misma, esperar algún balón que pudiese rematar dentro del área, pero lo cierto es que no le llegaban. Pero la insistencia del Mallorca en ataque obligó al uruguayo a salir del área rival y a ayudar al Valencia más cerca del centro del campo recibiendo y bajando balones.

El descanso fue revolucionario, ya que tras una mala primera parte del Valencia, José Bordalás decidió sacar del terreno de juego a Maxi Gómez, Diakhaby y Racic y dar paso a Alderete, Soler y Marcos André. Delantero por delantero y de esta manera el técnico alicantino señala a tres jugadores que pudieron hacer mucho más durante el partido. En el caso del atacante, no es que no marcará sino que no tiró ni una vez a puerta.

Marcos André

Pese a que el partido se disimuló con un empate, lo cierto es que el ataque del conjunto valencianista fue nulo hasta el minuto 90. Antes de que se mostrara el añadido, tan solo Marcos André logró tirar a puerta. Al final fueron seis tiros de los cuales dos acabaron en gol. Y de los seis, dos fueron del delantero, además de que uno de los tantos fue a pase del brasileño. El atacante pide paso y espera que con sus datos ofensivos ofrecidos en la segunda parte, el técnico le dé más confianza y le sitúe en el once inicial del equipo.