Paulista regresa con la seguridad defensiva

Desde el retorno del central hispanobrasileño el equipo ha crecido atrás y sus tres apariciones se cuentan por porterías a cero

Gabriel Paulista, frente al Getafe

Gabriel Paulista, frente al Getafe / Europa Press

Pau Pardo

Pau Pardo

El regreso de Gabriel Paulista al equipo tras su lesión de larga duración ha permitido al Valencia dar un gran salto de calidad a nivel defensivo. La fragilidad atrás ha sido el gran quebradero de cabeza de José Bordalás y su cuerpo técnico durante esta temporada, pero con la elección del esquema de tres centrales y el retorno el hispanobrasileño, parece que el equipo ha dado con la tecla para no encajar y crecer desde la defensa. Los números y, sobre todo, las sensaciones, así lo avalan.

Desde que Paulista volvió a jugar (contra el Mallorca en Son Moix), el Valencia solamente ha encajado un gol (en propia contra el Granada) y fue precisamente el único en el que descansó. En sus tres apariciones, el equipo ha dejado la portería a cero y prácticamente no ha concedido ocasiones de gol. Especialmente bueno fue el balance defensivo valencianista en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey en Mestalla contra el Athletic Club

El impacto del ‘5’ ha sido total. Tanto por su aportación personal: agresividad en los duelos, saber estar, juego aéreo y velocidad en las coberturas, como por su influencia en la línea defensiva. A sus 31 años aporta madurez, experiencia y tranquilidad a Mocutar Diakhaby y Omar Alderete (25 años).

Los datos respaldan la diferencia que marca la presencia de Paulista. En lo que va de curso ha podido disputar 15 partidos, en siete de los cuales el equipo ha conseguido dejar la portería a cero. Unos guarismos que contrastan y cobran todavía más valor si se tiene en cuenta que en los 20 en que no ha estado por lesión, el equipo solamente ha logrado cerrar la puerta en cuatro (una de ellas contra el Utrillas en Copa). 

Defensa de tres

A nivel táctico, la tecla ha sido el cambio de sistema para jugar con tres en defensa. Desde que Bordalás lo probó contra el Atlético Baleares en Copa, lo ha puesto en liza hasta siete veces y los datos son difíciles de mejorar. Siete partidos con este esquema, cinco porterías imbatidas y siempre que la tripleta de centrales ha sido Diakhaby-Paulista-Alderete ha cerrado la puerta. Solamente encajó un gol contra el Sevilla y tres contra el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano demasiado condicionado por la lesión de Alderete que obligó al equipo a acabar con un once plagado de jugadores de corta edad, especialmente atrás.