El gesto de la afición del Valencia CF con Guedes y Soler

No solo fueron aplausos. Mestalla se puso en pie y coreó sus nombres. Se les quiere. Hay ganas de disfrutarlos. Hay miedo de darlos por vendidos

Guedes intenta marcharse de Pepelu

Guedes intenta marcharse de Pepelu / JM Lopez

Andrés García

Andrés García

Era el día más difícil de la temporada. Tardó Mestalla en llenarse. Tardará años en superar la fatídica tanda de penaltis de La Cartuja. Pero el valencianismo es muy grande. Respondió en la grada el día que no apetecía ir al campo y recibió al equipo con una sobrecogedora ovación mientras se proyectaban imágenes de la grada de la final de Copa en el videomarcador. Los jugadores devolvieron los aplausos. Fue un «GRACIAS» a dos bandas. Uno por el apoyo en la grada. Otro por el compromiso en el campo. Y fue una tarde de emociones. Contra la RFEF a grito de «¡Corrupción en la Federación!» y contra Meriton con los clásicos «¡Peter, vete ya!» y «¡Anil, canalla, fuera de Mestalla!». La vida sigue igual. Y seguirá mientras la propiedad no se vaya.

El Derbi dejó más momentos. Soler y Guedes se llevaron más que una ovación. No solo fueron aplausos. Mestalla se puso en pie y coreó sus nombres. Sonó especial. Porque hay ganas de disfrutarlos. Porque sobre todo hay miedo a que los vendan. Mestalla también aprovechó para pedir la continuidad de Hugo Duro y para dar ánimos a Yunus Musah por aquel penalti que se atrevió a tirar y que siempre le acompañará. El Valencia no ganó, pero Mestalla celebró algo. La consagración de Giorgi Mamardashvili. El georgiano ya es ídolo en Mestalla. No hubo Copa, no habrá Europa, pero hay portero. Y pronto habrá Derbi. Mestalla solo cantó «¡A segunda, oé, a Segunda, oé!» cuando los ánimos estaban muy caldeados. Antes buena parte de la afición reprobó el cántico. Una lección más de la mejor afición del mundo.