Cuarto asalto entre enemigos íntimos

Bilbaínos y valencianos se miden en su cuarto asalto de la temporada. Será el partido más atípico porque es el primero en el que los dos equipos no luchan por el mismo objetivo y quizás en esta diferencia de alicientes pueda estar la clave principal para encararlo, máxime teniendo en cuenta que las tres entregas anteriores estuvieron marcadas por la intensidad y el tacticismo. Entre todos los enfrentamientos del curso solamente se han sumado cinco goles entre ambos equipos, con dos empates a uno y una victoria valencianista por uno a cero en la vuelta de las semifinales de Copa del Rey.

Todos los duelos han tenido una tónica muy similar: balones largos, multitud de duelos, muchos kilómetros y verticalidad a la hora de atacar. José Bordalás apeló a su equipo en la rueda de prensa previa al partido a dejarse la piel por responsabilidad con el escudo y es que en caso de mantener la intensidad y la motivación hay muchas opciones de ver un guion similar.  

Los 'fijos' de Bordalás que no tienen su futuro asegurado en Mestalla

Lanzados antes del partido en San Mamés

El equipo de Marcelino afronta el partido en un ‘pico’ motivacional. Sus últimos resultados han sido positivos y se ven con opciones de entrar en Europa después de un curso plagado de altibajos y en el que la Copa fue durante un largo tramo de temporada el principal aliciente. Tras ganar al Atlético de Madrid en la última jornada, el cuadro vasco afronta el duelo en San Mamés lanzado a por un triunfo que multiplique sus opciones.

Juego directo

Es una de las credenciales principales no solamente del Athletic, sino también de cualquier equipo de Marcelino. El Valencia se enfrentará a un combinado que va a tratar de atacarle por la vía rápida, sin perder ‘demasiado’ tiempo en la elaboración y buscando jugar con sus hombres más veloces en transición.

En este sentido cobra especial importancia la figura de un Iñaki Williams que está en su mejor momento de la temporada. También Raúl García, pero en el caso del navarro para ganar duelos y proyectar a sus compañeros a la espalda. En Copa del Rey el equipo de Bordalás lo supo neutralizar a la perfección con su defensa de tres. Tanto en el juego aéreo como con Mouctar Diakhaby pegado al ‘9’ y aguándole en las carreras a campo abierto. 

Balón parado

Otra de las grandes claves es la pelota parada. Ya se pudo ver en la ida de las semifinales coperas, en las que el Athletic se adelantó aprovechando una falta lateral. No fue casualidad, ya que los bilbaínos son el tercer equipo de LaLiga con más goles a favor en esta faceta (11) y el cuarto que menos encaja (5). El Valencia, por contra, es el sexto que más recibe (10) y tendrá que estar muy atento porque en un contexto de igualdad, atasco y poca circulación, estas situaciones suelen marcar la diferencia.

Superioridades

El 1-4-4-2 del Athletic se medirá a un Valencia con defensa de tres. Los de Bordalás tienen muchas papeletas para generar superioridad numérica en el pasillo central, pero tendrá que ser muy preciso en repliegue y basculación para protegerse de los dos contra uno en banda contra los carrileros. La precisión y la inteligencia a la hora de ocupar los espacios será capital a la hora de mantener la competitividad y conseguir sacar algo positivo de la catedral.