Toni Lato pide galones a gritos

El de la Pobla de Vallbona siente la confianza de Gattuso, ha recuperado su mejor nivel físico dejando atrás sus problemas con las lesiones y quiere ser tan importante dentro del campo como ya lo es fuera

Toni Lato, protagonista frente al Getafe

Toni Lato, protagonista frente al Getafe / Francisco Calabuig

Andrés García

Andrés García

Toni Lato vivió el domingo una de las noches más felices de su vida con un brazalete de capitán, un golazo de bandera y una emotiva ovación de Mestalla con su familia y amigos en la grada que nunca olvidará, pero no se conforma. Tiene hambre de más. El de la Pobla de Vallbona afronta esta temporada con mucha ilusión. Siente la confianza de Gennaro Gattuso, ha recuperado su mejor nivel físico dejando atrás sus problemas con las lesiones y quiere ser tan importante dentro del campo como ya lo es fuera. 

A pesar de su juventud (24 años), Toni es uno de los líderes del vestuario. Está cerca de los cien partidos oficiales con el Valencia (90), tiene el respeto de sus compañeros y se ha convertido, como Hugo Guillamón, en uno de los ‘nuevos’ capitanes de Gattuso tras la venta de Carlos Soler al PSG. Toni ha pertenecido al círculo de poder de la plantilla los últimos años junto a sus inseparables amigos José Luis Gayà, Jaume Domènech y el propio Soler. Ahora, sin el ‘10’, se siente preparado para dar un paso adelante y asumir todavía más responsabilidades a todos los niveles. 

La jerarquía y la influencia de Lato entre sus compañeros está fuera de duda. El objetivo de Toni ahora es coger protagonismo también en el verde a pesar de la competencia brutal que existe en la posición de lateral izquierdo con Gayà y Jesús Vázquez. Su polivalencia para jugar de extremo a pie cambiado (como en pretemporada) y la normativa de los cinco cambios por partido juegan a su favor. Aunque su gran aval, más allá de su compromiso y su calidad técnica innata, es que físicamente está al cien por cien después de un duro verano en el que llegó a cancelar un viaje fuera de España para quedarse a trabajar en Paterna con un plan específico del propio Gattuso. Ese sacrificio comienza a tener recompensa. 

El italiano está encantado con el jugador. La prueba es que rechazó las ofertas para salir que tuvo encima de la mesa. Rino habla mucho con él y le está ‘enseñando’ a bajar la intensidad en los entrenamientos. El italiano lo ha tiene que frenar en Paterna para que no corra riesgos innecesarios de lesión. Hay ‘feeling’ entre los dos. Hasta el punto que Gattuso bromeó con su deseo de tenerlo como suegro. De momento, Toni ha aprovechado las ausencias de Gayà y Jesús (ha participado en las cuatro primeras jornadas de LaLiga) y el sábado estará a disposición del entrenador en Vallecas para seguir sumando. 

El sueño de Lato es ser importante en el Valencia y renovar. Su contrato, como el de Gayà, finaliza el próximo 30 de junio de 2023. El club rechazó su cesión al Getafe los últimos días del mercado de fichajes porque, además de querer dinero, todavía no ha tomado la decisión de renovarlo. Sus agentes -los mismos que Gayà- están en contacto con la presidenta Layhoon Chan en medio de las negociaciones para la renovación del capitán y ahora mismo no se descarta ningún escenario. El deseo de Lato es quedarse muchos años más y va a apurar sus opciones hasta el final. Gattuso lo quiere muy cerca, pero la última palabra como siempre será del máximo accionista del club Peter Lim.