Después de una temporada 2022/23 en la que el vestuario del Valencia Clúb de Fútbol y su afición han pasado una de las campañas más complicadas del último siglo, Rubén Baraja no ha recibido soluciones desde Singapur para fortalecer una plantilla bajo mínimos. El mercado de verano, cuando se logró el objetivo de a permanencia, se presentaba con aires de revolución. El técnico vallisoletano tenía claras sus ideas y ha tenido prácticamente total autonomía en el apartado de salidas. Hasta la fecha, se han priducido hasta once bajas en la plantilla. De los que estaban en propiedad, Cavani, Herrerín, Yunus Musah, Lato, Racic, Koba (cedido) y Jorge Sáenz son los jugadores que han abandonado Mestalla este verano, Otras bajas importantes han sido las de Lino, Kluivert, Nico González y, también, Ilaix, pues finalizaron sus respectivas cesiones en junio.
Poder de decisión
Al contrario que en otros apartados de mercado, la entidad valencianista ha dado salida a los jugadores en propiedad que ha pedido el técnico. Al inicio de pretemporada, el técnico comunicó a los jugadores quienes estaban en la rampa de salida y así se dio. A pesar de las numerosas salidas, todavía está pendiente solucionar las situaciones de Marcos André y Castillejo, que son dos jugadores con los que no cuenta Baraja, pero sus salidas están algo enquistadas. Sin embargo, por más que el vallisoletano ha tenido poder en las salidas, no ha podido lograr que permanezcan jugadores como Kluivert, Lino o Nico González, que se encontraban cedidos y eran de su agrado.
