La temporada 98/99 permanece grabada a fuego en el corazón de todos los valencianistas menores de 30-35 años, ya que fue la primera vez que vieron a su equipo del alma levantar una Copa. La brillantez con la que se consiguió contribuye a engrandecer el título.

Otro dato que da valor al triunfo es que el Valencia, esa campaña, estuvo compitiendo durante once meses, ya que en julio del 98 comenzó su andadura en la Intertoto y la final de Copa fue el 26 de junio del 99. Además, dio la cara en todas las competiciones: fue cuarto en Liga (logrando billete para la Liga de Campeones); y en la Copa de la UEFA, a la que llegó tras ganar la Intertoto, fue eliminado por el Liverpool en segunda ronda, pero sin perder ningún partido y por el valor doble de los goles en campo contrario (0-0 en Anfield y 2-2 en Mestalla).

Pero la Copa del Rey fue inolvidable. El Valencia debutó en octavos de final debido a su presencia en las competiciones europeas. Allí se vio las caras con el Levante, por entonces en Segunda B. Los dos equipos de Valencia se enfrentaban en competición oficial por primera vez en muchos años. No obstante, los de Claudio Ranieri ganaron con facilidad plasmando la diferencia de categoría: 0-3 en el Ciutat y 1-0 en Mestalla.

En cuartos de final llegó el primer hueso: el Barcelona de Van Gaal, que más tarde ganaría la Liga. Pero el Valencia (especialmente Claudio López) le tenía tomada la medida al conjunto blaugrana y pasó tras dos partidos y dos victorias memorables. En el Camp Nou se ganó 2-3, con dos goles del 'Piojo' y una obra de arte de Mendieta (volea desde fuera del área trasa saque de esquina que entró por la escuadra). En Mestalla, nuevo festival ofensivo y triunfo por 4-3. Angulo, Claudio López en dos ocasiones y Mendieta fueron los goleadores blanquinegros.

Tras el Barcelona, el sorteo deparó al otro 'coco' en las semifinales: el Real Madrid. Pero era la hora del Valencia. En la ida, en Mestalla, el conjunto merengue fue humillado por una máquina de hacer fútbol. El 6-0 fue concluyente y hasta corto. Claudio López, Roche (2), Vlaovic, Mendieta y Angulo fueron los ejecutores de este resultado histórico. Tras este resultado, la derrota (2-1) del Bernabéu quedó en anécdota.

El título estaba a sólo un partido. Sevilla fue la sede elegida para que Valencia y Atlético de Madrid se disputaran la gloria. Se esperaba un partido a cara de perro, pero, a la hora de la verdad, la superioridad ché fue manifiesta. Los Mendieta, Ilie, Farinós, Claudio López y compañía superaron en todo a los colchoneros, especialmente tras el 1-0, obra del Piojo. Para el recuerdo quedarán también el soberbio tanto de Mendieta (control con el pecho y sombrero para superar a dos rivales, todo sin dejar caer el balón) y la cabalgada de Claudio López para lograr el definitivo 3-0.

Los jugadores fueron recibidos como auténticos héroes en la capital del Turia. Había hambre de gloria en la afición. Pero lo más importante de este logro es que devolvió la fe y la autoestima a toda la entidad y abrió la puerta a todos los grandes éxitos que llegarían a partir de la temporada siguiente.