Nikola Zigic estuvo dos horas y media encerrado en el aeropuerto de Manchester ayer a la llegada del equipo a tierras británicas. El internacional serbio tuvo problemas con el visado y le tocó esperar para obtener el permiso de las autoridades aeroportuarias inglesas, previa comunicación con el Consulado de Serbia. La expedición llegó al hotel sin el gigante mientras este esperaba en la terminal aunque, por suerte, una vez subsanado el problema cogió un taxi junto a un empleado del club y acudió al hotel de concentración donde tuvo que almorzar al margen de sus compañeros.

Posteriormente, ya por la tarde, Unai Emeryno no pudo incluirle en la lista de convocados del encuentro al no tener los papeles en regla (se le dejó entrar pero no ´trabajar´) y fue el único de los 23 desplazados que se quedó sin jugar ni un solo minuto (hasta Moyá jugó).

Segunda vez

Se da la circunstancia de que no es la primera vez que Nikola Zigic tiene problemas con sus documentación —cabe recordar que no es comunitario— puesto que ya cuando estaba a las órdenes de Ronald Koeman, en un viaje con su selección del que tenía previsto regresar antes de tiempo para poder estar con el equipo, en el aeropuerto de Milán-Malpensa no se le permitió entrar en la zona Schengen al no tener un documento necesario llamado ´autorización de regreso´.

En aquella ocasión el jugador, con permiso del club, optó por regresar a la concentración con su selección esa misma noche, jugar el amistoso que tenía previsto al día siguiente y así tramitar la documentación para regresar después a España con normalidad tras el partido.