La fecha del 6 de septiembre de 2009 entró en la historia del Valencia. Nunca antes en los 90 años de vida de la entidad de Mestalla un equipo formado íntegramente por mujeres había defendido los colores blanquinegros. Nunca hasta ayer. El Valencia CF Féminas debutó oficialmente en la Superliga Femenina, cogiendo el testigo y la plaza del Colegio Alemán. Lo hizo, por si fuera poco, disputando como local un derbi ante el Levante UD. Ganó el conjunto granota por cero a dos, aunque sobre todo ganó el fútbol femenino valenciano. Eso sí, la polémica de la semana también estuvo presente ayer por la mañana. Porque también entró en la historia del Valencia las instalaciones de Taronger, cobijo del equipo que dirige Óscar Suarez ante la decisión del Consejo de Administración del Valencia de impedirles jugar en la Ciudad Deportiva de Paterna.

El encuentro, más allá del fútbol, sirvió para que el Valencia, en este caso Társilo Piles, consejero y presidente de la Fundació (entidad de la que depende el Valencia CF Féminas), escuchara críticas por la decisión tomada respecto a la sede de los partidos del equipo femenino. Carmen Alborch y Mercedes Caballero, dos de los políticos valencianos que más luchan por el deporte femenino y por la igualdad de trato entre hombres y mujeres, reprocharon a Piles el «menosprecio» que desde el Consejo se ha tenido con las jugadoras del Valencia al informarles cuatro días antes del partido que donde dije digo, digo Diego y que nada de jugar en Paterna. Pero no solo desde el PSPV-PSOE quedó clara la postura respecto a la decisión del club de Mestalla.

La presencia de los concejales del Partido Popular Cristobal Grau y Félix Crespo evidenció también el apoyo que desde el Ayuntamiento de Valencia se da al fútbol femenino. De hecho, Cristobal Grau, a la vez patrono de la Fundació VCF, es una de las personas que en los últimos meses más se han volcado en las negociaciones habidas entre la Fundació VCF y el Colegio Alemán.

Társilo Piles, que no dudó en acudir como máximo representante de la Fundació, explicó que los motivos económicos han prevalecido en la decisión tomada desde el Club de Mestalla, si bien, se comprometió a estudiar con detenimiento el caso para buscar soluciones. Y todo ello con Quico Catalán, director general del Levante, y Pedro Malabia, Colegio Alemán, de testigos.