El Valencia CF celebra este lunes una junta general extraordinaria de accionistas, convocada a finales de julio, cuando la empresa Inversiones Dalport controlaba el 50,3 por ciento del capital social del club, pero que llega en un momento en el que la propia sociedad es la que controla mayoritariamente su capital.

Durante el mes y medio que ha pasado desde la convocatoria de la junta hasta la fecha de su celebración, el panorama del club ha cambiado completamente y la asamblea tendrá lugar una vez se ha cerrado el proceso de ampliación del capital.

Éste asciende a 101 millones de euros y es propiedad de la entidad a través de su Fundación que controla aproximadamente el 75 por ciento de los títulos, ya que del total de 2.114.000 títulos en los que se divide el capital social del club, posee más de 1.500.000 acciones.

La situación del Valencia en la junta general extraordinaria de accionistas marcada en primera convocatoria para este lunes nada tiene que ver con la del momento en que se fijó y los puntos incluidos por Dalport en el orden del día no encontrarán el apoyo del accionista mayoritario de la sociedad, la Fundación Valencia CF.

Ésta anunció públicamente, tras la reunión de su patronato del pasado miércoles, que votará en contra de las propuestas del la empresa Dalport, que superaba el cincuenta por ciento de los títulos cuando provocó la convocatoria, pero que perdió su mayoría accionarial en la sociedad al no acudir a la ampliación de capital.

La junta fue convocada a petición de un grupo que se conformó en torno a esa empresa, con el apoyo de las acciones de los ex dirigentes de la entidad Juan Soler, Vicente Soriano, portavoz del grupo, y Juan Silla, que en aquel momento representaban poco más del cincuenta por ciento de los títulos de la entidad.

El pasado 28 de julio, con el proceso de ampliación de capital social ya iniciado, el consejo de administración del Valencia, que preside Manuel Llorente, convocó la junta con la inclusión de los puntos del orden del día que le propusieron estos accionistas mediante un requerimiento notarial.

El orden del día de la junta contempla en su primer punto el cese de los actuales miembros del consejo de administración y el nombramiento de nuevos consejeros.

En el segundo punto se incluye "dejar sin efecto el acuerdo adoptado en la junta general de accionistas de 7 de junio de 2009 de aumento de capital de la sociedad, la revocación de la delegación de facultades del consejo de administración y demás acuerdos complementarios relativos a su ejecución".

Finalmente, el tercer punto del orden del día incluye el examen de la gestión social y el ejercicio, en su caso, de la acción social de responsabilidad contra los medios del consejo de administración saliente que proceda.

En la convocatoria, se especifica que el orden del día se ha incluido a instancias del solicitante de la convocatoria y que el consejo de administración había acordado requerir la presencia de un notario para levantar acta de la junta.

Ante todos estos puntos, la Fundación ha anunciado que votará no, por lo que tan sólo el de ruegos y preguntas abrirá la posibilidad de debatir sobre el cambio en la estructura de propiedad de la entidad, dado que la Fundación ha adquirido acciones por un valor de 75 millones gracias a un crédito por este importe de Bancaja, avalado por la Generalitat.

En este sentido, queda por despejar la incógnita del papel que jugará o no jugará la empresa Dalport en la reunión, en función de si considera que el club no ajustó su actuación en los plazos de la convocatoria de la junta a su petición.

Por ello podrían darse un abanico de posibilidades que van desde la no presencia de la representación de Dalport en la junta hasta la impugnación de la reunión.