Gonzalo Navarro, jugador del cadete A de Crack´s que esta temporada está formado íntegramente por jugadores del VCF tras el convenido firmado entre ambas entidades, va a estar entre cuatro y seis meses de baja. El defensor cayó lesionado esta semana en un encuentro triangular (lo que se conoce como ´3 en 1´) disputado en Riba-roja tras un lance fortuito y desde la localidad de Camp de Túria fue trasladado de urgencia al Hospital 9 d´octubre donde fue sometido a una intervención quirúrgica de urgencia en la que se le corrigieron las fracturas de tibia y peroné con desplazamiento y tobillo, con la ayuda de dos placas y un tornillo que ahora lleva colocados dentro de su articulación.

SUPER se puso en contacto con el futbolista quien explicó lo ocurrido: «Era en el segundo de los dos partidos de media parte que jugamos, contra el Riba-roja. Yo di un pase hacia la banda y justo después noté un golpe. Desde ese momento supe que algo fuerte me había pasado porque tenía mucho dolor». Durante el tiempo de espera hasta que llegó la ambulancia, en el túnel de vestuarios, ya empezó a tener conciencia de la lesión que podía tener y que horas más tarde se confirmó.

Fortuito e involuntario

Gonzalo tiene claro que en la jugada no hubo mala intención: «Son cosas que pueden pasar en el fútbol y estoy convencido de que fue totalmente fortuito. Además, la gente del Riba-roja se ha interesado por mí y eso es de agradecer».

Tanto Diego Ribera, coordinador de la escuela de Riba-roja y precisamente ex jugador valencianista, como el capitán del equipo cadete, Tarazona, el presidente, José Reig, y el propio futbolista con el que se produjo el lance, Javi, estuvieron visitando a Gonzalo en el hospital tras su operación.