Marius está en Lituania, concentrado con su selección para el partido del viernes contra Escocia. Desde allí, a 3.000 kilómetros de distancia, descuelga el teléfono y al otro lado se le intuye feliz, contento. «Claro que puedo atenderte, pero hablo poco castellano». Es cierto, habla poco, pero tiene tantas ganas que con la ayuda de un perfecto italiano se entiende claramente lo ansioso que está por jugar en el Valencia. De hecho, cuando recibió la llamada del club blanquinegro no se lo pensó ni un instante.

Ya se puede decir que Marius Stankevicius es nuevo jugador del Valencia. Estará contento…

—Sí, estoy muy feliz por haber fichado por el Valencia. Es un equipo grande de la Liga española y de Europa. Para mí supone una oportunidad única, es un honor.

—¿Tenía ganas de volver y seguir jugando en la Liga española?

—Después de jugar media temporada en el Sevilla cuando recibí la llamada del Valencia no me lo pensé. Me encanta el fútbol español, pero no sólo el fútbol, también me gusta el país y su forma de vida.

—Por cierto, ¿qué aprendió de su paso por Nervión?

—Una experiencia en un campeonato muy competitivo como el español, que sin duda me ayudará en el Valencia. Los dos son clubes ganadores.

—¿Cuando le llegan noticias de que puede venir como cedido?

—Hace unos diez días que mi agente me habló de la posibilidad y le dije que no le diera muchas vueltas porque es un equipo muy importante y una ocasión excelente. Es cierto que tenía otras opciones de la Liga española, pero sin duda la mejor era la del Valencia.

—¿Ya ha pensado lo que significa este paso en su carrera?

—Jugar en el Valencia es una satisfacción enorme, pienso en ello porque se trata de un grandísimo club, pero también estoy centrado en la selección de Lituania, estos días vamos a jugar partidos importantes. Conozco bien lo que es el equipo. Mi principal deseo es acoplarme lo más rápido posible y acoplarme a los nuevos compañeros. Quiero aportar mis cualidades, devolver la confianza depositada en mí con una buena aportación en el campo.

—¿Qué ambiciona en su segunda aventura en España?

—Me gustaría convertirme en un jugador importante del Valencia. Lo más importante es que el Valencia gane muchos partidos, ganar todo lo que podamos, porque eso significa que todos, no solo los jugadores —también los seguidores— vamos a ser felices.

—¿Qué me dice del equipo?

—Sé que el Valencia es un excelente equipo, un grande de la liga española. De hecho la temporada pasada fue tercero por detrás de Real Madrid y Barcelona y tal y como estuvieron esos dos equipos... Ser tercero era importante. Además está en la Liga de Campeones, y eso es una motivación muy grande para cualquier jugador.

—Escuchar el himno de la Champions tiene que ser lo máximo…

—Sí, poder disfrutar de los partidos de Champions es lo más grande. Es una motivación para mí y tengo muchas ganas de jugar al máximo nivel europeo.

—Sin embargo, no podrá jugarla hasta la siguiente fase, los octavos.

—Ya tuve la oportunidad de jugarla este año con la Sampdoria… Pero no pasa nada. Espero que ahora el Valencia pase adelante y después ayudarle con mi juego, sumar en busca de éxitos.

—La temporada pasada se enfrentó al VCF en el Sánchez Pizjuán…

—Así es, me enfrenté a ellos y son muchos los jugadores de calidad que tiene. Personalmente, no conocía a ninguno, pero pronto lo haré sin problemas, soy una persona que se integra bien. Tengo ganas de ver la Ciudad Deportiva, conocer a los compañeros y ponerme a trabajar ya.

—Personalmente, no. Pero, en lo deportivo, ¿qué jugadores del equipo le gustan o sabe más de ellos?

—De casi todos, cómo no conocerlos, si el VCF es un club importantísimo y conocido en España y por el mundo. A jugadores como Joaquín, Pablo, Albelda… Los conoce todo el mundo.

—Y los delanteros, Aritz Aduriz y Roberto Soldado. El año pasado se midió contra los dos y, por cierto, con bastante éxito.

­—Sí, sí, me acuerdo de jugar contra los dos. Son dos delanteros que luchan mucho y hoy es una suerte que estén en mi equipo. Me acuerdo bien. Con un par de delanteros como Soldado y Aduriz podemos hacer buenas cosas. Pero yo siempre pienso que lo primero para llegar lejos es el bloque. Nosotros debemos formar un equipo, entonces subirán las opciones de ganar un partido tras otro.

—Dicen de usted que nunca se queja, que los entrenadores están encantados con su comportamiento disciplinado en lo profesional y en lo táctico. ¿Esa fama es cierta?

—Nunca tengo problemas, lo importante es que el equipo esté bien y para eso cada uno tiene que poner su parte y no crear polémicas. Yo puedo ayudar en la parte del campo que quiera el entrenador, donde más útil sea al conjunto. Siempre estoy preparado para poner toda mi fuerza, mi 100% ó más por el bien del equipo.

—Otra de las referencias sobre Stankevicius es su polivalencia para jugar en el lateral derecho, como central o en el medio si es necesario. ¿Cuál es su posición preferida?

—Todas las posiciones me gustan, lo más importante por encima de todo es jugar y sumar minutos.

—¿Pero en sus inicios dónde jugaba, como central o lateral?

—Sinceramente, no lo sé muy bien porque ya desde muy jovencito era central o lateral derecho, según lo que necesitaba el equipo. Incluso, puedo jugar como lateral por la izquierda. No me importa la posición en el terreno, sino la victoria, sumar los tres puntos.

—Llama la atención como después de jugar un número elevado de partidos con el Sevilla no se quedó allí, el Sevilla no decidió hacer efectiva una opción de compra y regresó a la Sampdoria. ¿Cómo se lo explica?

—No sé muy bien qué decir porque es un asunto del club que tomó esa decisión, es una pregunta para ellos. A mí no me dieron muchas explicaciones… Puede ser que al final creyeron que era mejor fichar a un francés que ha llegado libre porque acaba contrato y gratis (Mouhamadou Dabo). Pero bueno, prefiero hablar de mi nuevo equipo el Valencia, el reto va a ser muy bonito para mí.

—Por último, del mismo modo que a Sevilla, viene a Valencia en calidad de cedido y con una opción de compra para los blanquinegros. Supongo que su objetivo es convencer a los directivos y técnicos y quedarse en España, en el VCF.

—Lo he dicho antes y es lo que pienso, el Valencia es un grande no sólo de España, sino que también lo es en el continente europeo. Por supuesto, que voy con la intención de dar mi máximo para conseguir buenos cosas colectivas y personales y poder quedarme en este club.