Después de la polémica creada en torno a Manuel Fernandes, tras la negativa del jugador portugués a recalar en calidad de cedido esta temporada en el Málaga, ayer se produjo en Paterna el reencuentro entre el mediocentro y el entrenador, Unai Emery. Los dos dialogaron durante unos minutos antes de que Fernandes se retirase a los vestuarios. La semana pasada, tanto el coordinador de la secretaría técnica —Braulio Vázquez— como el propio técnico vasco se refirieron al internacional luso, exigiéndole un plus de rendimiento e implicación. Unas declaraciones que no han sentado nada bien a Manuel.

Braulio le mandó este mensaje: «Él nos trasladó la posibilidad de salir, le hemos ofrecido alguna salida y no la ha aceptado. El club se ha portado muy bien con él y la misma implicación que tiene el club con él, Fernandes tiene que demostrarla con el Valencia… Por él se ha hecho una inversión muy importante y la queremos recuperar aquí». Un par de días después, Emery añadió: «Manuel es un jugador que el Valencia fichó como promesa y que tiene que hacerse realidad. Queremos sacarle el máximo rendimiento, sea aquí o en otro equipo».

El Valencia le reclama «compromiso» y que «coja la batuta y aporte». Después de una salida frustrada que él mismo había solicitado, ya que considera que hay varios jugadores por delante de él en la zona medular, el portugués está dispuesto a sumar, tal y como lo quiere el entrenador. Sin embargo, a Manuel no le han gustado nada las formas en las que el club le pide más, en público y no directamente y justamente cuando no ha estado presente en Valencia por los compromisos internacionales de la selección. Además, el jugador considera que esas mismas palabras cambian en el cara a cara.

Ayer, momentos antes de que Manuel se marchara para los vestuarios, Unai Emery se acercó al jugador para conversar brevemente con él. Emery —además de interesarse por su estado físico después de participar en los dos partidos de la selección lusa— le transmitió un mensaje positivo, sin ánimo de reprochar situaciones del pasado y en busca de que el jugador sume y aporte sus virtudes al equipo. El míster de Hondarribia siempre ha considerado que Manuel se trata de un jugador muy aprovechable, con calidad, y que puede dar más de lo que se ha visto hasta el momento. El entrenador comentó el pasado viernes que Fernandes «ha mejorado cosas, acercándose al colectivo, pero todavía le queda mucho por hacer».

Por último, el centrocampista portugués se entrenó ayer a menor ritmo, haciendo carrera y en el gimnasio, al igual que lo hicieron Éver Banega y Juan Mata… Los tres internacionales que más carga de minutos han tenido.