Gran ambiente. El Valencia CF regresó de Gijón entre bromas. Una de las que escuchaba ayer en el avión era: «¡Que el Madrid nos hace el paseíllo!». Y es que el VCF no coincidió con el Real Madrid en el aeropuerto de Manises por veinte minutos. Habría sido la imagen de la jornada. Un equipo despegando abatido después de empatar sin goles contra el Levante y perder el liderato y otro, el Valencia, aterrizando con toda la confianza y moral del mundo, en lo alto de la clasificación. Sólo veinte minutos salvaron a Jose Mourinho de un nuevo mal trago, después del que había pasado en el Ciutat de Valencia.

Por veinte minutos no coincidieron

23:20 horas. El vuelo chárter del Real Madrid sale hacia la pista de despegue con un cabreo generalizado después de dejarse dos puntos de oro en Valencia. 23:40 horas. El chárter CRJ 900 de Air Nostrum del Valencia aterriza en Manises con una sonrisa de oreja a oreja. Veinte minutos de diferencia que salvaron al Real Madrid de una nueva humillación y que levantaron algunas bromas dentro de avión valencianista. Tampoco hubo mucho movimiento. El único que se levantó fue Navarro y lo hizo para hablar con sus padres, sentados unas asientos más adelante.

Sin fuerzas para celebrar la victoria

Fue una de las pocas bromas que ayer se escucharon en el vuelo de vuelta a Manises. Había tanta satisfacción por el trabajo bien hecho como cansancio en las piernas de muchos jugadores. Ya sucedió algo parecido en el autobús de regreso a Alicante. Este equipo es tan solidario en el campo, hay tantas ayudas y se dejan tanto la piel en el campo que, como reconocía un miembro del cuerpo técnico, no le quedan fuerzas… ¡ni para celebrar! Ayer tuvieron día libre, pero hoy ya toca volver al trabajo para preparar el partido de Champions del miércoles.

La afición recibió a los jugadores

Los que sí tenían ganas de celebrar la victoria del VCF en El Molinón fueron el medio centenar de personas que, aprovechando que era sábado por la noche y que todavía era una hora prudente, recibieron al equipo en el aeropuerto de Manises para hacerse fotografías y conseguir autógrafos de sus ídolos. Los más aclamados fueron Mata, Soldado… y Emery. Fueron muchos los que reconocieron la labor del técnico y los que quisieron darle la enhorabuena en persona.

La afición del Sporting lo despide con insultos

Todo eran caras de alegría. Hasta la del pobre Juan Mata que tuvo que soportar cómo la afición del Sporting de Gijón en El Molinón lo despedía con insultos cuando fue sustituido. Y eso que el asturiano nunca se ha declarado ´anti´ del Oviedo. Eso fue lo malo, lo bueno fue la despedida de todos sus familiares —incluido su padre- en una sala al lado de la zona mixta—. Juan pensó en quedarse en Asturias para ver el Sporting B-Oviedo en su día libre, pero finalmente regresó a la capital del Turia para estar más tranquilo. El miércoles se juega mucho ante el Manchester.

Repaso del partido en el avión

Igual de satisfecho estaba Manuel Llorente, convencido de que este es mejor equipo que el del año pasado a pesar de las ventas de futbolistas y mientras el cuerpo técnico repasaba el partido en el avión. Sabían que si ellos no empezaban fuertes en el partido lo iba a hacer el Sporting de Gijón. Esa era una de las consignas. Salir muy enchufados en los primeros minutos del encuentro como ya sucedió en el último desplazamiento contra el Hércules en Alicante. Dicho y hecho.

El argentino decía que «estoy bien»

El que peor cara llevaba en la expedición blanquinegra era el ´Chori´ Domínguez. El jugador argentino andaba cabizbajo, pero levantaba el pulgar de su mano derecha cada vez que se cruzaba con alguien. «Estoy bien». Según nos contó el propio jugador, recibió un rodillazo en una jugada en la que estaba cubriendo un balón. Se llevó un buen golpe en «la cabeza del fémur» y sintió que se lo bloqueaba la pierna. Se acercó a la banda, habló con Voro, luego con Unai Emery y fue sustituido. Hoy intentará entrenar con el resto del grupo según cómo evolucione del golpe.