Vicent Guaita no sólo se conforma con defender la portería del Valencia. También quiere ganar partidos. Y eso es lo que ayer hizo sobre el césped de Mestalla. El canterano salvó al equipo de un gol cantado del delantero del Deportivo, Lassad, en el minuto 49. A lo César. El de Torrent obró el milagro con una espectacular mano a ras de césped que fue celebrado por la afición como si de un gol más se tratara. Era casi más importante que un gol, puesto que Unai Emery ya había puesto en alerta a sus jugadores de la dificultad de marcar el 1-0 y de lo complicado que se habría puesto el partido con un gol en contra. Guaita no sólo está creciendo a pasos agigantados bajo palos. También se está convirtiendo por méritos propios en un ´San Guaita´ para este Valencia.

Lo demostró cuando más difícil es para un portero. A los pocos minutos de empezar la segunda partes y después de unos cuarenta y cinco minutos en los que a penas había tenido que intervenir. Sólo un disparo a las nubes de Lassad y de Manuel Pablo se habían acercado entre sus tres palos. Fue cuatro minutos después de salir del descanso cuando la figura de Guaita apareció. Y lo hizo para empezar a ganar el partido. Lassad recibió un balón completamente sólo dentro del área de Guaita. Controló el balón, levantó la cabeza y se sacó de la manga un disparo raso y ajustado al palo largo de Guaita que parecía medio gol. ¡O tres cuartos de gol! Fue en ese momento cuando el joven arquero del Valencia se estiró y sacó una mano derecha a ras de césped que desvió el balón milagrosamente a saque de esquina. ¡Menudo paradón! Sus compañeros le felicitaron y Mestalla se puso en pie para rendir una merecida ovación a su ´niño´ criado en Paterna. No fue esa su única aparición en el partido. Sólo un minuto después, estuvo muy valiente en una salida anticipándose a Adrián tras un pase de Juan Rodríguez desde la derecha. El Deportivo no volvió a llegar hasta el minuto 89 con un centro de Adrián al que no llegó Colotto por los pelos. Daba igual, el de Torrent ya estaba cubriendo la portería por si a caso. Se acababa el partido y Guaita volvió a salir a hombros por la puerta grande. Como los buenos toreros.

Sus compañeros le felicitaron en el mismo césped —especialmente la pareja de centrales, Dealbert y Stankevicius— y posteriormente no repararon en elogios en sala de prensa. Uno de ellos del capitán, Vicente Rodríguez. «Es un portero que puede estar muchos años en la portería del Valencia, estoy convencido de que hay un portero para muchos años, pero tiene que competir con dos grande porteros ahora como con Moyà y Cesar y tiene que seguir trabajando», dijo.