Braulio Vázquez habló ayer con Miguel Brito. El pasado 26 de enero, el Ministerio Público de Portugal hizo pública la acusación sobre Miguel por tenencia ilícita de un arma, en unos hechos ocurridos el 26 de diciembre de 2009, que en los últimos días han salido a la luz pública. Hasta el momento sólo se trata de una acusación, y al futbolista portugués aún no le han notificado cuándo tiene que ir a dar su versión de los hechos. Se trata de un asunto que preocupaba a la Dirección Deportiva, de ahí que el Coordinador de la secretaría técnica se presentara ayer en las instalaciones de Paterna para ver cómo se encontraba, pero tras la misma se quedaron muy tranquilos. A Miguel le vieron bien, le dio su versión —que en unas semanas dará a un juez si la acusación continúa— y Braulio le dio ánimos, confiando en que mantenga la trayectoria del curso actual, en la que ni Emery ni sus compañeros han tenido ninguna queja sobre un futbolista que se ha convertido en un blanco fácil.

Conforme han ido pasando los años, Miguel ha logrado abstraerse de todo lo que se dice sobre su persona, y la opinión del presidente Manuel Llorente y de los técnicos está siendo muy positiva. Consideran que en la temporada actual, en la que ha lucido el brazalete de capitán en varios partidos, está totalmente centrado en el fútbol. También valoraron que renunciara a seguir vistiendo la camiseta de Portugal para centrarse en el Valencia y por eso, en la reunión que tuvo el pasado verano con el presidente de la entidad, el mensaje que le transmitieron era de que si está en sus mejores condiciones es un futbolista «importante» dentro del equipo. Los hechos le están dando la razón y ahora el club ha querido estar a su lado para animarle. Sus compañeros no le ven afectado para nada e insisten cuando les preguntan que habrá que escuchar su versión antes de emitir un juicio, como están realizando en Portugal varios medios de comunicación. Se trata de un proceso que puede demorarse varios meses, y lo que le han dicho al futbolista es que esté totalmente tranquilo. Ayer, al abandonar las instalaciones, unos aficionados le pararon para hacerse unas fotografías con él, pero cuando ya se marchaba, uno de ellos le faltó el respeto y tuvo el gesto instintivo de alzar el dedo corazón. Pero el incidente no pasó a mayores.

Regresará al once inicial

Miguel no jugó en Santander, pero Unai ha decidido volver a darle la titularidad, y ayer trabajó con la teórica defensa titular.