Ni era tan grave en Viena ni es para lanzar las campanas al vuelo en Lisboa. A pesar de ello, el Valencia CF borró de un plumazo la mala imagen mostrada en el último partido amistoso ante el Rapid y, de paso, aguó la fiesta de la presentación del Sporting de Lisboa con una goleada por 0-3.

Los de Emery sembraron un verdadero caos en la defensa de los lisboetas en la primera mitad. Fue en los primeros 45 minutos cuando el Valencia asestó los tres golpes mortales a su rival. Parecía que iban a comerse el mundo los portugueses, con un estadio a reventar y en su día grande. Nada más lejos de la realidad cuando en el primer minuto de juego Pablo Hernández avisó con un derechazo al palo de Rui Patricio.

La defensa adelantada de los locales y la nula coordinación en su salida de balón fue aprovechada por los más listos de los 22 jugadores que había en el campo. Bernat, junto a Piatti y Jordi Alba, brillaron en el ataque del conjunto valencianista con su inteligencia en el desmarque y velocidad. El primero se estrenó como goleador en una jugada de ratón de área. Tras un saque de banda, Soldado dejó botar el balón y entre el portero y el defensa rival apareció la cabeza de Bernat para empujar el 0-1.

El Valencia CF tradujo su dominio del partido en ocasiones de gol: Piatti, Bernat, Soldado... El valenciano no llegó al primer pase al espacio de Albelda pero sí al segundo. Balón largo del hoy nuevamente capitán del Valencia CF que corrió Soldado. El '9' dejó en evidencia a su par en carrera, le ganó la posición con el cuerpo y definió como él sabe en el uno contra uno.

Piatti también tuvo su premio al gran trabajo realizado y a falta de pocos minutos para el final del acto se convirtió en el máximo goleador del Valencia CF de esta pretemporada. Jordi Alba se metió hasta la cocina y le sirvió en bandeja el gol.

La segunda mitad siguió por los mismos derroteros. El Sporting de Lisboa sacó su vergüenza torera y luchó más el partido, pero el centro del campo era propiedad del Valencia y la defensa rival un habitat perfecto para las salidas rápidas a la contra del Valencia. Se entonó más Pablo Hernández, que intentó asistir en dos ocasiones a Piatti, y Ricardo Costa estuvo a punto de peinar el cuarto.

A partir de aquí llegó el carrusel de cambios de Emery y el partido se desvirtuó. De entre los nuevos, Mata y Feghouli salieron con ganas de más marcha. El asturiano tuvo varias acciones donde buscó el cuarto del partido. Pero quien más cerca estuvo fue Portu en una rápida contra en el minuto 89. Feghouli se la puso perfecta pero el canterano quiso controlar cuando la jugada pedía el disparo de primeras.