Son muchos los futbolistas que destacaron en Dubai, pero hubo uno que deslumbró por encima del resto. Con sus cuatro asistencias y un único tanto, Nacho Gil, el hermano de Carles, fue elegido como el mejor jugador del torneo. Tanto es así, que el jeque le invitó a la cena de goleadores tras un partido en el que él no había visto puerta. Su intención era clara; quería convencer a una de las perlas de Paterna para que fichase por algún equipo de la zona. «Me sorprendí cuando me comentaron que tenía que acudir a la cena porque yo no había marcado. Una vez allí, el jeque me dijo que le había gustado mucho mi juego y que si quería quedarme en Dubai», afirma el canterano que prefiere matizar: «Es cierto que me lo dijo, pero en un tono de broma. Eso sí, no dejó de hablarme de las maravillas de un emirato como aquel y lo bien que vivían allí todos los futbolistas de élite», concluye.