El presidente Vicente Andreu y algunos accionistas más fueron a la sede de la Fundación para explicar a Aurelio Martínez el plan para reunir mil valencianistas que pongan 50.000 euros destinados a comprar el paquete mayoritario de acciones del Valencia CF. El presidente de la Fundación los recibió y les dijo que pueden contar con él, incluso para ser uno de los que ponga los 50.000, aunque al mismo tiempo les transmitió sus dudas al respecto de que puedan alcanzar su objetivo, entre otras cosas porque «a Bankia no le haría mucha gracia», dijo.
Andreu establece el objetivo de esta iniciativa en «democratizar el Valencia y que se quede en manos de los valencianos, conocemos las dificultades pero esta puede ser una solución para el Valencia», explica. «¿Qué se les puede decir? Pues apoyarlos, no hay otra fórmula. Primero habrá que reunir los mil accionistas y después ver cual sería el precio de transferencia. Les he dicho que cuenten conmigo y que es una solución difícil pero también para la Fundación, las dos son difíciles, vamos a ver cual sale», expresó Aurelio Martínez. Cuenta además que «las dos soluciones „la que trabaja la Fundación y la de Andreu„ al cien por cien no son compatibles porque la Fundación dejaría de ser el máximo accionista.
No hubo tanto buen rollo ni buenas palabras cuando en la reunión salió el asunto de la auditoría, sobre la cual la Fundación y el Consejo mantienen diferencias. Primero habrá que ver quién la paga, porque quien decide llevarla a cabo es la Fundación pero han de solicitarla y asumir su coste el consejo de administración y el propio Valencia, así que a día de hoy tampoco habría que descartar que sufra un retraso y quien ejecute la decisión de solicitar la auditoría de cuentas sea el consejo entrante, no el saliente. Aurelio Martínez confía en que no será así y que la próxima semana se pueda adjudicar entre las cuatro firmas a las que se ha solicitado propuesta, cuatro de las grandes auditoras a nivel nacional e internacional: Price Waterhouse, KPMG, Ernst & Young y Deloitte.
